El ex futbolista inglés, David Beckham, decidió invertir parte de su capital en una empresa que se dedica a pasar autos clásicos en vehículos completamente eléctricos.

El mundo del fútbol y de los autos siempre estuvo cerca. Ya sea porque una automotriz decidió ser sponsor de un equipo o porque algún jugador decidió darse un gustito personal. Sin embargo, David Beckham, el ex mediocampista inglés, decidió llevar su amor por las cuatro ruedas a otro nivel. A él siempre le gustaron los autos vintage y es por ese que decidió invertir un poco de sus activos en el negocio la conversión de autos clásicos a eléctricos.

Clásicos y eléctricos: El nuevo negocio en el que apostó David Beckham

El paso de autos clásicos en eléctricos está de moda en varios lugares del mundo, algo que molesta a los coleccionistas de los grandes clásicos. Incluso en algún caso se reinterpreta la carrocería actualizándola. Es un negocio que está teniendo sus resultados. Esto le permitirá a los propietarios de automóviles clásicos seguir circulando pese a que sus motores de origen no cumplen con las directivas sobre emisiones y, por tanto, tienen la circulación limitada o restringuida en distintos países.

Clásicos y eléctricos: El nuevo negocio en el que apostó David Beckham

Beckham decidió invertir en Lunaz, una de las empresas británicas especialistas en estas transformaciones y que ya realizó algunos auténticos lujos. Su fundador y propietario es David Lorenz. No son, desde luego, juguetes baratos. Hay que partir de la base que esta empresa trabaja con autos que en su momento fueron sinónimo de lujo y/o deportividad. Y la cotización de estos es elevada. Hay que restaurarlos usando materiales nobles como los originales. Y aplicar ‘reingeniería’ para actualizar algunos elementos como frenos o suspensiones.

Clásicos y eléctricos: El nuevo negocio en el que apostó David Beckham

El motor original deja su espacio a un motor eléctrico, por lo general mucho más pequeño pero también mucho más liviano, a lo que se suma el pack de baterías. Lunaz realizó una espectacular reconversión de un Jaguar XK120 y otra de un espectacular Rolls-Royce Phantom V de 1961, del que espera poder comercializar varias unidades.

Clásicos y eléctricos: El nuevo negocio en el que apostó David Beckham

Los compradores serán, sin duda, entusiastas de los Clásicos, aunque más interesados por las líneas, el estilo y los materiales empleados que por las mecánicas ocultas bajo el capot. Obviamente, el precio de estas joyas no está al alcance de todos. Un Range Rover de primera generación podría costar 350.000 dólares, mientras que el Rolls Royce no bajaría de los 600.000. Beckham declaró que le atrae la empresa “por el trabajo de restauración de algunos hermosos automóviles clásicos a través del reciclaje y la electrificación”.