En un nuevo Instagram Live New Driver dialogó con el empresario Damián Pozzoli. Durante la charla, uno de los socios de Inverlat, contó su fanatismo por los autos clásicos, lo cual lo llevó a ser el presidente actual del Club de Automóviles Sport.

Desde hace mucho tiempo que Damián Pozzoli es una persona reconocida en el ámbiente empresarial, pero a la par también tiene la posibilidad de disfrutar de otra de sus grandes pasiones: los autos clásicos deportivos. New Driver dialogó con uno de los socios de Iverlat S.A para hablar de su puesto como presidente del Club de Automóviles Sports, de cómo nació este amor por las cuatro y dos ruedas, cómo ve el futuro del país y mucho más.  

¿Cómo venís llevando la cuarentena?

La verdad que bien, pero se extraña mucho el salir a dar una vuelta con los autos o las motos, se extraña juntarnos con amigos y dar un vuelta. Usar los autos, no están hechos para estar parados, están para disfrutar y si es con amigos mejor. Ya los limpiamos, los acomodamos, ya hicimos todo. Estamos desesperados por sacarlos a dar una vuelta.

Se extraña más a los amigos o los autos

Mirá, nosotros somos un grupo grande que salimos para todos lados, en Argentina tenemos varios eventos, de los cuales participamos, de hecho el último fue el Rally de las Bodegas y después llegó la cuarentena. Pero, eso se extraña, salir con amigo, y obviamente poder disfrutar de eventos de acá y de afuera.

¿Qué se siente ser presidente del C.A.S?

Ser presidente es un honor y una responsabilidad grande. El club me dio mucho como socio y ahora en este rol de presidente es hermoso, sobre todo porque siempre cuento con ex presidentes que te van dando una mano y todos hacen y aportan a la causa.

¿Cómo es organizar las 1000 Millas?

Es el evento más importante del club y se corren en Noviembre. Siempre se hicieron en Barriloche, salvo un año por problemas del volcán que se organizaron en Córdoba. Es un evento en el cual participan muchos socios del club, de otros clubes y también tripulaciones del exterior. Contamos con un equipo donde cada uno tiene un rol y eso hace que organizarlo lleve tiempo, de hecho, comenzamos a organizar el de este año un poquito antes de la cuarentena. No sabemos todavía que puede pasar, pero, pongo todas las energías que vamos a poder salir adelante.

¿De dónde nace tu pasión por los autos?

Nace de chico, como todos, jugando con autos, a que sos pilotos, las carreras. A mí siempre me gustó eso. Y de grande hace ya unos años, me ofrecieron ser parte de 1000 Millas como sponsor y ahí comenzó la pasión por los clásicos, después me pude comprar un auto que me gusta y así fue creciendo. Este es un mundo que a medida que vas entrando no hay vuelta atrás. Es un mundo donde cada vez te metés más. Disfrutás de los eventos, los paisajes, los amigos y los autos. Es un excelente vicio. Estás todo el tiempo viendo autos, arreglando alguno también.

Hablás mucho de los amigos, pero ¿cómo hacés cuando te toca competir contra ellos?

El Club de Automóviles Sport es un club de carreras. Con lo cual es un grupo de amigos que se dedica a correr carreras y disfruta de los autos. Yo digo que partes de las iniciales del club está la A que es la amistad, la S que es la sana competencia y la C es compromiso por el club. Cuando estamos en un evento o en una pista somos todos competidores y queremos ganar sanamente. Pero cuando termina la carrera empezamos a disfrutar de todas las otras cosas que están ahí.

¿Sos competitivo?

No, probablemente porque nunca llegué a estar entre los primeros diez. Mi felicidad es terminar la carrera. Que el auto no se rompa y disfrutar del evento. Me siento también muy afortunado también porque tengo tres hijos que me acompañan en las carreras. Los dos varones son apasionados y ya disputaron las 1000 millas. Ellos con sus autos y yo con el mío. Son socios del club también. Ahora, disfruto con mis amigos y con mis hijos.

¿Te gustan sólo los autos clásicos o también los de la actualidad?

Me gustan todos. Los modernos, los clásicos. No solamente los autos sino que también las motos. Hay un auto para cada oportunidad. Yo las 1000 millas las corro con un auto, la Tour Auto con otro, la Mille Miglia con otro, los viajes en moto hay una para cada tipo de viaje y para todos los días también uso autos modernos para moverme. A mí me gustan mucho los sports que no son los más cómodos y con caja manual. Tiene otro gusto.

Me comentaron que en el CAS tienen una regla muy particular…

Es así. Cómo lo dice su nombre es un Club de autos sports y nos juntamos todos los lunes a cenar en una casa que tenemos en Victoria. Tiene un parking para autos y vos solamente podes ingresar a él si tener un auto sport. Si no vas con un auto sport tenés que estacionar afuera. Es así la regla del club.

¿Qué opinión tenés sobre el futuro automotriz con los autos eléctricos?

Un insulto al auto deportivo. Claramente, el mundo va para ahí, sin dudas. En algunos países de Europa no podés entrar a algunas ciudades con autos clásicos que no tenga cierta homologación. El desarrollo del auto eléctrico es una amenaza para el automovilismo deportivo histórico. En mi opinión el desarrollo del auto eléctrico tiene sus limitaciones. Hoy si el parque automotor de Alemania sería del 20% necesitarían construir dos centrales atómicas para abastecer de energía a ese parque automotor demandaría. Es algo para las próximas generaciones. Nosotros vamos a poder todavía sentir el “perfume a nafta”.

Desde New Driver te queremos pedir un consejo ¿Qué auto me recomendás para salir a pasear un domingo soleado por San Isidro?

Una pregunta difícil. Esto es una cuestión de gusto. Si esa pregunta se la hacer a los 150 socios del CAS vas a tener 150 respuestas diferentes. Mi gusto para un día como ese sería hacerlo en una Mercedes Pagoda o un Jaguar E-Tyle de año 69 como el que tengo, el cual para mí es el que mejor diseño tiene y es un auto hermoso para manejar. Es cuestión de gusto. Hay gente que no le gustan los autos ingleses y le gustan los italianos. A algunos les gustan los americanos.

Si por “X” motivos te tenés que quedar con un solo auto de todos los que tenés ¿con cuál te quedás?

Muy difícil. Tengo catalogado un auto para cada evento. Yo tengo una Ferrari Dino para correr la Tour Auto, tengo un Jaguar XK 140 que lo utilizaría para correr la Mille Miglia, tengo el Hudson para las 1000 millas. Es muy difícil quedarme con uno. Si al final del día me apretás mucho creo que me quedo con la Dino porque es un auto fantástico con motor central que se disfruta muchísimo. Es velos, potente, muy dócil. Con una gran historia porque fue el auto que Enzo fabricó para su hijo Dino. En mi corazón tiene su lugar preferencial.

¿Cuál fue el auto que más te costó desprenderte?

Un Aston Martin que ganó uno de los primeros premios en Auto Clásica, el año que Aston Martin cumplía sus 70 aniversarios. Era un auto color cremita y con el que corrí muchas veces la Mille Miglia. Un auto de 1933. Una maravilla, una escultura rodante. Pero por el año del auto largaba bastante adelante y después de un tiempo me empezaban a pasar muy fácil y uno que es competitivo no le gusta. Entonces, tomé la decisión de comprarme el Dino y comenzar a correr la Tour Auto.

Este mundo de los autos clásicos siempre te deja una historia para contar…

Yo creo que debo ser uno de los principales usuarios del Automóvil Club porque vivo usando las camillas, me vivo quedando. El auto clásico, como las motos clásicas tiene el tema que siempre te pasan cosas. Al ser autos tan antiguos se rompen. Pero después se arreglan y van para adelante. Pero en cada situación que me pasó algo dentro de esta actividad me quedó una anécdota para contar que es lo lindo de todo esto.

Más allá de tu amor por los autos clásicos, queremos preguntar: ¿Cómo ves el futuro del país y de las empresas con la experiencia que tenés?

En este país tenemos la característica de vivir permanentemente en un momento bisagra y este es otro más. En la medida que las empresas puedan sobrevivir se van haciendo más fuerte, vamos ganando fortaleza, es una carrera de supervivencia tremenda esta. Tuve la posibilidad de trabajar en otros países y yo amo a este país. Me encanta Argentina y por eso invierto acá. Por ahí me hubiese ido mucho mejor si hubiese invertido en otros lados pero esto es lo que elegí. Estos momentos no son fáciles, son momentos donde las empresas tienen que afrontar sueldos y gastos sin actividad. Hay un gran sentimiento de ansiedad de poder rehacer nuestras vidas y a que las empresas puedan empezar a fabricar y vender sus productos. Volver de alguna manera a la vida que teníamos, que seguramente no va a ser igual.

¿Cuáles son las prioridades que tienen en sus empresas en particular?

La gente y estamos haciendo todo lo posible para que sufra lo menos que se pueda. Y también preparándonos para que cuando todo esto se termine salgamos a la cancha de vuelta. Ese día tenemos que salir lo más fuertes posible. Este es un tiempo de preparación y mejorar los procesos. El mundo se va a abrir y Argentina va a poder salir a competir de nuevo en el mundo.

Haciendo una analogía con los autos, es una carrera que hay que tener paciencia pero que se puede ganar…

Estamos corriendo todos de la mejor manera que puede. Los argentinos nos preparamos para esto, lo hicimos miles de veces. Tenemos una crisis cada 10 años. Somos gente fuerte y que vamos para adelante. Yo no tengo ninguna duda que vamos a salir. Nos costará más o menos. Estamos ahora en el medio del río y es la gran incertidumbre que hay.

Me imagino que también se espera ese día para poder salir y poder disfrutar nuevamente también de los autos…

Estamos desesperados. Ya tenemos un montón de asados planeados. Tenemos los próximos 18 meses todos planeados. Seguramente va a suceder lo mismo que pasó después de la Segunda Guerra Mundial donde el consumo tuvo un pico porque la gente quería dejar atrás todo eso que había pasado. Si bien, no hace tanto que estamos sin poder salir, cuando lo podamos hacer vamos a aprovechar todo ese tiempo que no lo pudimos hacer. Va haber un montón de eventos de autos.

Y la última pregunta es: ¿Qué tan importante son los autos en tu vida?

Muchísima. Me gusta mucho trabajar, le dedico un montón de horas, estoy en muchos directorios de compañías pero te puedo decir que lo que me gusta hoy en día es dedicarle tiempo al CAS. Lo hago con mucha pasión. Hay cosas que me salen mejor y otras peor pero la verdad que le pongo mucha pasión. Una gran parte de mi vida se la dedico a esto.