Una plataforma de ventas de vehículos tomó  la proporción áurea de cientos de vehículos desde 1950 hasta la actualidad para determinar cuál es el auto más lindo fabricado. Ferrari quedó en lo más alto.

A lo largo de la historia automotriz se crearon muchísimos autos. Algunos tuvieron éxito, otros no tanto. Ediciones limitadas, deportivos, camionetas, con detalles curiosos. De todo. Sin embargo, al parecer y mediante un estudio se conoció al más lindo de todos los tiempos. Se trata de la Ferrari Monza SP1. Este resultado lo consiguió Carwow, una plataforma de ventas de vehículos que llevó a cabo una investigación.

Estudio científico: ¿Cuál es el auto más lindo de la historia?

Esta empresa, para develar esto, se basó en la proporción áurea, también conocida como número de oro o divina proporción. ¿De qué se trata? Es una ecuación matemática de más de 2500 años de antigüedad a partir de la cual se determina las proporciones ideales. La fórmula se empleó en alrededor de 200 modelos de altas prestaciones que se vendieron en distintas partes del mundo desde 1950 hasta hoy. Se mapearon catorce puntos del diseño de cada uno de ellos, para luego comparar sus proporciones.

En un sistema informático se introdujeron los datos del formato de los faros, el parabrisas y los espejos, entre otros puntos. Luego se midió la distancia entre todos y se calculó un resultado. El auto que más se acercó a la proporción áurea es la Ferrari Monza SP1, con una cercanía del 61,75 por ciento. Y como fue el mejor resultado, se lo bautizó como el auto más lindo de la historia.

Estudio científico: ¿Cuál es el auto más lindo de la historia?

Entre los primeros diez del ranking hubo numerosos modelos producidos en las décadas de los 60 y 70. El segundo lugar quedó para el Ford GT40 de 1964, cuya aproximación a la proporción ideal es del 61,64 por ciento. El podio lo completó la Ferrari 330 GTC Speciale de 1967, con un 61,15 por ciento. Entre los mejores 5 quedaron el Lotus Elite de 1974 y la Ferrari 250 GTO de 1962.

Cuando se diseñó el Monza SP1, la idea de la marca de Maranello fue mantener el espíritu de los modelos de mediados de Siglo XX, pero con la tecnología de hoy. Para eso la división Special Projects partió de la 812 Superfast, una Ferrari bien actual. Pero aplicó toques de diseño retro muy llamativos. No tiene techo pero sí un parabrisas muy pequeño retráctil. Los faros traseros forman una sola línea, que se completa con el difusor y cuatro salidas de escape.

Estudio científico: ¿Cuál es el auto más lindo de la historia?

El motor es un impresionante V12 6.5 de 810 CV a 8.500 rpm y 719 Nm a 7.000. La tracción es trasera. Pesa apenas 1.500 kilos y es capaz de acelerar en 2,9 segundos de 0 a 100 km/h. Para llegar a los 200 km/h necesita 7,9 segundos. La velocidad máxima es superior a los 300 km/h.

Para alivianarla lo más posible la carrocería fue hecha en fibra de carbono. En el interior todos los comandos fueron reconfigurados en relación a las Ferrari convencionales para adaptarlos al poco espacio de una plaza.