Audi mostró en el Salón del Automóvil de Shangai un nuevo tipo de pintura para sus autos. Se trata de una que refleja la radiación térmica y disminuye el calor dentro del habitáculo.

Los distintos salones del automóvil de todo el mundo siempre sirvieron para que las marcas muestren sus nuevos vehículos pero también distintas herramientas para los mismos o detalles fuera de lo común en los que trabajan las distintas marcas. Uno de los más llamativos quizás de esta edición en Shangai es la pintura que dio a conocer Audi para el A6 e-Tron Concept.

La pintura que presentó Audi que disipa el calor para utilizar menos el aire acondicionado

La carrocería de este sedán, el cual llama mucho la atención por su estético y coeficiente aerodinámico, incorpora una pintura que Audi denomina Heliosilver y hace alusión al color elegido de aspecto tecnológico pero que también tiene una funcionalidad inédita.

Al mismo tiempo que añade presencia y funcionalidad a la apariencia del Audi A6 e-tron concept acentúa las formas con un efecto tridimensional de profundidad que resulta especialmente visible en la zona de los pasos de rueda quattro. Asimismo, en el frontal, la parrilla Singleframe, también en color Heliosilver, contrasta con el acabado negro mate de su marco. Un contraste que se repite en las secciones de los paneles bajo las puertas en los laterales del vehículo, y que pone de relieve sus proporciones horizontales.

La pintura que presentó Audi que disipa el calor para utilizar menos el aire acondicionado

Además de aportar estas características, la pintura también ofrece ventajas técnicas que permiten reducir el consumo de energía, ya que puede reflejar un porcentaje significativo de la radiación térmica de la luz solar, reduciendo de esta forma el calor que llega al habitáculo.

Según Audi el resultado es que, en muchas situaciones, no es necesario recurrir al aire acondicionado para mantener constante el confort térmico del interior, que es uno de los principales factores que influyen en el consumo de energía. Esto beneficia la autonomía del vehículo y la huella de CO2 en cada kilómetro recorrido, e incluso cuando el coche está parado en un semáforo.