El presidente volvió a defender hoy las políticas sanitarias llevadas adelante durante la cuarentena en el país y  sostuvo que “No es, como repite algún tonto, que nos enamoramos de la cuarentena. Está visto que es lo que tenemos que hacer”.

Alberto Fernández se refirió a a cuarentena en un acto al recorrer la planta de Volkswagen, ubicada en el partido bonaerense de Tigre, junto al gobernador bonaerense Axel Kicillof, al referirse a las críticas de un sector de la oposición, No solamente dijo que “no nos enamoramos de la cuarentena” sino que también advirtió que le preocupa  “tanto la salud de la gente como la productividad de la economía argentina”.

El comentario de Alberto Fernández apunta a las críticas de Juntos por el Cambio, que días atrás cuestionaron al Gobierno al evaluar que la pandemia “le ha dado la excusa para empoderarse y aparece lo peor del kirchnerismo”, por la cuarentena adoptada en el país por la pandemia de coronavirus.

El mandatario dijo que el país está “muy lejos de haber terminado el problema” de la pandemia de coronavirus y ratificó que seguirá privilegiando “la vida y salud de la gente”, al referirse a las extensiones que ha tenido la cuarentena en el país

En esa línea, volvió a referirse al “modelo sueco” desde un punto de vista crítico: “Solo Suecia fue el más flexible con el tema y tiene los mismos resultados económicos de los que hicieron la cuarentena. El problema no es nuestro, es del mundo. Si se paraliza parte de la economía (mundial), no hay forma de sacarla adelante”.

Por otro lado, Fernández resaltó los protocolos sanitarios elaborados para la planta de la automotriz y destacó el “rigor del pueblo alemán en la racionalidad del manejo de conflictos”.

Además, contó una anécdota personal que mantuvo con la canciller alemana Angela Merkel, a quien elogió, durante el viaje que realizó en febrero.

Tuvo la generosidad de pedirme 10 minutos para hablar. Me preguntó qué mirada tenía yo del coronavirus. En ese momento se sabía poco, que había aparecido en China y que moría a los 24 grados de temperatura. Le dije que la preocupación nuestra iba a empezar en el invierno”, recordó Fernández.

Y continuó: “Ella (por Merkel) me dijo que el coronavirus iba a tener consecuencias en el mercado global enormes y que el comercio podía caer en 600 mil millones de dólares. Le dije en ese momento a Axel ‘esta mujer me está hablando de coronavirus y me dio una imagen tremenda’. No estaba equivocada y fue la única que me lo dijo”.

Antes del discurso del Presidente, el gobernador Axel Kicillof dio su visión sobre el recomienzo de la actividad industrial en la provincia de Buenos Aires: “Muchos piden volver a la normalidad. En Volkswagen eso no existe más. No se puede volver a la normalidad, es un sueño, es una fantasía y un suicidio colectivo. Al virus se lo puede contener, pero no controlar”.

Desde ayer, Volkswagen retomó la producción en su planta de la localidad de Pacheco a partir de la autorización de las autoridades nacionales, del gobierno de la provincia de Buenos Aires y del municipio de Tigre, en base a un protocolo.

El reinicio se hizo en un solo turno de trabajo de 6 horas (comienza a las 6 de la mañana) al que concurren 1.500 trabajadores bajo estrictas medidas para prevenir la propagación del COVID-19.