El gobernador bonaerense Axel Kicillof reclama una cuarentena total y estricta para enfrentar la segunda ola de contagios.

El Gobierno Nacional, el Provincial y el de Ciudad están muy preocupados y ocupados en ver qué medidas tomar para resguardar a la población de los contagios de coronavirus. Esto genera diferencias sobre el regreso a fases más restrictivas para contener los contagios, como por ejemplo el que tiene lugar actualmente entre el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el ministro de Economía, Martín Guzmán.

El presidente Alberto Fernández, cursando actualmente una infección por coronavirus y aislado, mediará entre ambas posturas. También deberá negociar con el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, quien tampoco quiere regresar a una fase restrictiva y se muestra confiado en que la estrategia de testeo y aislamiento de casos positivos y sus contactos estrechos dará resultados suficientes para contener la segunda ola.

Kicillof quiere cerrar todo

Por su parte, Kicillof alista una propuesta de regreso a un aislamiento fuertemente restrictivo por un período acotado de no más de tres o cuatro semanas. No obstante, para Guzmán el país “no podría soportar” un cierre total de actividades como al inicio de la pandemia.

Kicillof quiere cerrar todo

“Hoy la economía no podría soportar un cierre total, una cuarentena estricta del tipo fase 1 como aquella que se implementó en marzo de 2020, pero esa no es la idea”, opinó Guzmán en diálogo con el canal CNN.

Según dijo, “desde el punto de vista de las restricciones de circulación va a ser otra historia de lo que fue en marzo de 2020″. “Pensemos que la economía está diseñada, preparada, funciona con circulación. Entonces por más que haya pandemia el efecto sobre la economía es menor”, afirmó.

En la provincia de Buenos Aires, sin embargo la preocupación crece. Según dijo Kicillof este domingo, el crecimiento de contagios fue explosivo en la última semana en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y ya se detectó la cepa Manaos en territorio bonaerense, una de las más contagiosas y de mayor mortalidad entre jóvenes.

La idea de la Provincia es avanzar entonces hacia un esquema de cuatro semanas de fase 1 estricta y tres meses en fase 3, que permite habilitar algunas actividades, pero manteniendo restricciones de circulación y de actividades recreativas y sociales.

Para intentar alcanzar un punto de equilibrio, hoy tendrán lugar nuevas reuniones para seguir debatiendo en vistas de “intercambiar información y encarar el trabajo en conjunto” y “fijar una política sanitaria coordinada para el AMBA”.