El presidente de Richmond afirmó que están a la espera del principio activo de la vacuna Sputnik V para comenzar a producirla la semana que viene.

Sputnik V en Argentina. Marcelo Figueiras, presidente de Richmond, en declaraciones para el medio Télam, informó que la planta de Pilar tiene la capacidad de producir y envasar hasta 500 mil dosis de Sputnik V por semana. “Si todo sale bien la producción comienza la semana que viene; en este momento están fermentando en Moscú el principio activo del componente 1 de la vacuna y en cuanto terminen lo mandan para acá”, manifestó.

Ayer, el Instituto Gamaleya en Moscú, confirmó la habilitación para que Argentina produzca la vacuna. La aprobación llegó luego de que se analizaran 25.000 dosis de ambos componentes de la Sputnik V que se habían producido en Richmond en abril.

Figueiras, optimista con la noticia, anticipó: “si Rusia envía la materia prima y logramos empezar la semana que viene, para antes de fin de mes podríamos tener las primeras 500 mil dosis en la calle, siempre y cuando no haya demoras en el transporte, los controles de calidad, etc, que son factores que no dependen de nosotros”.

Sputnik V: se espera producir 500 mil dosis por semana
Diferentes estudios científicos afirman que la primera dosis de la Sputnik tiene una eficacia del 79,4%.

Finalmente, Argentina, será el primer país en producir la vacuna Sputnik V: “Una vez finalizada la producción se realizará el control de calidad tanto en el laboratorio como en el Instituto Nacional de Medicamentos (Iname) de Argentina y en el Gamaleya pero las dosis fabricadas quedan acá, por lo que Argentina se ahorraría tener que ir a Rusia a buscarlas” agregó Figueiras.

En cuanto a la fabricación en masa que se espera para los próximos meses, el presidente de Richmond, explicó: “La nueva planta está pensada para producir hasta 500 millones de dosis por año y ahí se podría hacer desde el principio activo hasta el envasado, es decir, la producción completa”, y también adelanto que: “tendrá la capacidad de realizar productos biotecnológicos y de producir vacunas de diferentes tipos de plataforma como, por ejemplo, la de Pfizer y la Sputnik, que usan diferente tecnología”.