River remontó el partido, ya que Rosario Central estuvo en ventaja con dos goles de Marco Ruben. Palavecino, que también convirtió por duplicado, fue el héroe millonario que posibilitó el empate
En su visita al Gigante de Arroyito para enfrentar a Rosario Central por la fecha 23 del torneo de la Liga Profesional que ya se adjudicó el jueves pasado, River rescató un empate en dos goles, luego de ir perdiendo 2 a 0 hasta cerca de los veinte minutos del segundo tiempo. Marco Ruben, autor de los dos goles del “Canalla”, se convirtió en el máximo anotador en la historia del club. Y Agustín Palavecino fue el héroe millonario al convertir ambos tantos
River estaba de estreno. Su visita a Rosario se dio tres días después de la obtención del campeonato. Y si bien uno no puede hablar de “resaca” posterior al festejo, si se vio un River menos intenso que el habitual, frente a un Rosario Central necesitado de puntos para clasificar a la Copa Sudamericana.
A River le costó “meterse” en el partido. Si una de sus mayores virtudes es la presión para obtener la pelota y la presición para jugarla una vez que la tiene en su poder, esta vez se lo vio con otro ritmo hasta casi la mitad del segundo tiempo.
Rosario Central, en cambio, fue toda intensidad ante la pasividad de su rival. Ahogó de entrada a River empujado por su público que no paró de alentarlo. Y tuvo un bastonero de lujo en Emiliano Vecchio, un jugador con mucha clase que siempre fue inteligente para superar la oposición de los jugadores contrarios.
Y a los 28 minutos, justamente una muy buena jugada de Vecchio por la izquierda en la que supera a Solari, termina en un pase rasante casi desde la línea de fondo, que Marco Ruben define de taco ante la presencia de Armani. Un golazo que ponía el partido 1 a 0 y era justo premio para el que mejor jugaba.
Y en el comienzo del segundo tiempo las cosas siguieron igual. Rosario Central más metido en el partido y llegando un segundo antes a las pelotas divididas. Así las cosas, a los 13 minutos, una pelota rápida en profundidad de Lo Celso para Blanco terminó en un centro que Ruben anticipó en el área chica con un cabezazo para convertir el segundo de Central y el segundo de su cosecha personal.
El “Gigante de Arroyito” era una fiesta. Se le estaba ganando al campeón y con dos goles de Ruben que lo llevaban a convertirse en el máximo goleador de la institución con 99 tantos superando a Waldino Aguirre que jugó en Central entre 1941 y 1951 y que había convertido 98 tantos. Lejos quedó el “Matador” Mario Kempes con 94.
Pero River se despertó a partir de los 15´ de la segunda etapa. Como si el segundo gol hubiera sido un cachetazo. Y fue de la mano de un jugador de crecimiento notable en la recta final del torneo: Agustín Palavecino. Primero, a los 23´ tomó en el borde del área un pase primera de Álvarez para someter a Romero con fuerte tiro bajo y descontar.
Pero la obra maestra fue el segundo. A los 29´recibió de espaldas a unos cinco metros del área un pase de Carrascal, giró, y sacó un disparo que se metió en el ángulo superior izquierdo del arquero rival. Otro golazo, esta vez para River, que había mejorado mostrando el juego que lo llevó a ser el justo campeón
El empate dejó a Central con gusto de que se podía haber llevado más, pero conforme. Y a River contento con la remontada. Tal es así que Gallardo decidió premiar al plantel con tres días de descanso. Buen partido en Rosario que repartió puntos y alegrías entre los dos
Rosario Central: Juan Pablo Romero; Damián Martínez, Facundo Almada, Gastón Avila y Lautaro Blanco; Gino Infantino, Emmanuel Ojeda, Emiliano Vecchio y Francesco Lo Celso (84´Mateo Tanlongo); Alan Marinelli (70´Michael Covea) y Marco Ruben. D.T.: Cristian “Kily” González
River Plate: Franco Armani; Robert Rojas; Paulo Díaz, Héctor David Martínez y Milton Casco (88´José Paradela); Bruno Zuculini; Santiago Simón (61´Federico Girotti), Enzo Fernández (88´Tomás Galván) y Agustín Palavecino; Julián Álvarez y Braian Romero (46´Jorge Carrascal). D.T.: Marcelo Gallardo.