Entrevista con Fran Andrade
Fran Andrade es actor, músico y estudiante de psicología. Tiene 38 años y una extensa carrera vinculada al arte. Nació en Bahía Blanca, y estudió actuación en la escuela de Raúl Serrano y Justo Gisbert. Además realizó seminarios con actores de la talla de Jorge Marrale y Osvaldo Santoro, entre muchos otros. En televisión participó de exitosas series como “Dulce amor”, “Las Estrellas”, “ATAV” y “El Encargado”.
Este multifacético artista también llegó a la pantalla grande: en 2012 integrando el elenco de “No te enamores de mi”, donde además compuso el tema homónimo Leitmotiv. Aunque protagonizó dos películas internacionales: una en Brasil y otra en Perú. Fran también es bicho de teatro, y pasó de El Conde París “Romeo y Julieta” en el Complejo Teatral San Martín dirigido por Virginia Lago, a protagonizar “Clímax”, por mencionar sólo dos.
Como si fuera poco, actuó con Guillermo Francella en “El Encargado”, una de las series más exitosas del 2022. En la actualidad Andrade es uno de los elegidos para acompañar a Nico Vázquez en “Tootsie”; el fenómeno teatral que el 16 de marzo verá la luz en el Lola Membrives. Este ´actor que canta´ como le gusta definirse a él, dialogó con News Digitales sobre sus comienzos, su excelente presente, y qué se traerá entre manos su prometedor futuro.
News Digitales: – ¿Cómo llegaste al proyecto de “Tootsie”?
Fran Andrade: – Llegué por una convocatoria que me hizo Mariano Demaría, el director, que pagó una entrada para verme en el teatro independiente cuando estaba haciendo algo con Lucas Santana. Después me escribió por Instagram porque ellos más o menos tenían seleccionada a la gente, pero querían ver el trabajo en escena y cómo funcionaba la energía con Nicolás (Vázquez). Fue muy lindo audicionar en el Lola Membrives, me fui con una energía especial de que algo iba a pasar, porque todo fluyó de una manera muy linda. De mi rol no te puedo spoilear mucho pero es muy divertido, hasta me doy el lujo de cantarle una serenata a Dorita, el personaje de Nico. Estoy muy agradecido y contento por esta experiencia, me llega en un momento muy particular. De hecho estoy feliz de trabajar con RGB, es una súper producción teatral y una puesta gigante de Gustavo Yankelevich con los mejores profesionales.
ND: – ¿Cómo es Nico Vázquez como líder?
FA: – Esto se lo dije a Nicolás en una charla. Es la primera vez que siento que estoy bajo el ala de un líder positivo. Había escuchado cosas muy buenas de él, y es así. Es muy generoso, muy compañero, todo el tiempo está intentando que el resto tengamos la posibilidad de ofrecer lo nuestro y proponer cosas, incluido el ensamble. Tanto él como Mariano están pendientes que todos tengamos nuestro lugar. Es un buen tipo, y veo mucha generosidad genuina de parte de él, estoy aprendiendo un montón.
Su participación en “El Encargado”.
ND: – ¿Cómo fue tu experiencia en “El Encargado” y en el trabajar con un número uno como Guillermo Francella?
FA: – Fue hermoso. Del casting me fui muy mal, pensando que me había equivocado con mi propuesta, porque pensé un escort muy comprometido con su trabajo pero muy agresivo. Después Gastón Duprat, uno de los directores, me dijo que justamente eso es lo que le había gustado, necesitaban que el personaje se le pueda plantar a Eliseo. Imagínate mi felicidad cuando me confirmaron el papel. Un mano a mano con Francella, para un actor es hermoso. El tipo es una influencia para mi, desde antes que yo decida ser actor lo veía, siempre me pareció genial su poder de improvisación, la verdad que maneja en la comedia y el manejo expresivo y corporal.
ND: – ¿Ya se conocían con Francella?
FA: – Un día me lo cruce en un farmacia, apenas había llegado a Buenos Aires y no me aguanté, me salió el fan de Wanda: “Guillermo, discúlpame, estoy estudiando actuación, ojalá algún día logre un cinco por ciento de lo que logras vos”, le dije. Me agradeció muy amable. Él ni se acuerda y no se lo conté.
ND: – Trabajaste en un montón de novelas como galán. ¿Renegaste alguna vez de ese mote o nunca te lo creíste?
FA: – No pienso que se trate de creerse o no un “mote¨. Como actor interpreto el tipo de rol para el que me convocan que, obviamente esta vinculado a mis características físicas. Yo intento ofrecerle mi impronta de la forma más genuina y verdadera posible. Me guste mucho o poco la propuesta, intento darle vida a ese posible ser vivo. Que sea galán o no es un detalle, los personajes tienen características físicas y psicológicas. No puedo reducir al personaje a un solo rasgo, a si es lindo o feo, porque tiene mil características y la totalidad hace al personaje.
ND: – ¿Lo padeciste en alguna oportunidad?
FA: – Alguna vez me peleé con mi imagen porque me sentía juzgado, pero no tenia terapia encima. No reniego de mis características físicas que son funcionales a un tipo de personaje necesario para una historia, las historias necesitan altos de ojos claros, bajos chistosos, narigones inteligentes o gorditos simpaticones con cara de bueno que quizá no son tan buenos, que se yo, son todos cliché que necesita un cuento y es muy importante que cada actor se reconozca en su estereotipo, enfrentar sus debilidades y así, poder potenciarlas.
“Salir desnudo en el Teatro Colón para la Opera Beatrix Cenci fue hermoso, si hubieran visto las caras de las señoras coquetas de la primer fila al ver un pito caminando en el escenario se hubieran divertido tanto como yo, me parecía genial”
ND: – Hiciste desnudos frontales en teatro, y en la serie de Star+ también hay una escena así. ¿Qué relación tenes con tu cuerpo?
FA: – Salimos hace 38 años, nos llevamos bastante bien, nos conocemos mucho, elegí encarnar en él. Pienso que uno como actor se prepara para poder exponerse en todo sentido frente a las personas sin dejarse afectar por lo que piensen, eso estudiamos, hacer de una irrealidad algo posible. En lo personal pienso que el desnudo debe justificar lo que la escena necesite, en este caso generar un gag.
De todos modos a veces soy muy inseguro, por supuesto que tengo mis debilidades respecto a mi cuerpo, todos las tenemos, y quien diga que no las tiene nos esta mintiendo. Trabajo para intentar aceptar mis complejos. Salir desnudo en el Teatro Colón para la Opera Beatrix Cenci fue hermoso, si hubieran visto las caras de las señoras coquetas de la primer fila al ver un pito caminando en el escenario se hubieran divertido tanto como yo, me parecía genial.
ND: – ¿Tuviste alguna propuesta indecente mientras trabajabas?
FA: – ¡Qué pregunta Agustín Rey! Tuve propuestas indecentes, si, antes eran “analógicas” en persona y muy incómodas, ahora son digitales e igual de incómodas.
ND: – ¿Qué te pasa cuando ves que cada día hay más famosos vendiendo contenido erótico en la web?
FA: – Nada me pasa, me parece hermosa la diversidad y la libertad para elegir como ganar guita, ojalá todos pudiéramos elegir como ganarla. Igualmente todo es guita, todos queremos guita, suena horrible, pero es tan asqueroso como real. Yo he puesto la cara mil veces para vender una latita de gaseosa, mi cara, la imagen de mi persona, para vender una gaseosa que no consumo y que no hace bien, y lo hice por guita. Todo es lo mismo, sólo es una cuestión de necesidades, de principios y de limites, pero vamos, todos vendemos nuestro cuerpo, nuestro tiempo, nuestra inteligencia, o nuestra imagen por plata. Ahora te pregunto yo a vos: ¿Estar 8 horas diarias entregando tu cuerpo y tu inteligencia a una empresa por un poco de plata no es lo mismo? Necesidades, principios y límites.
ND: – ¿Crees que fue cambiando con el paso del tiempo?
FA: – Hoy cualquiera puede hacer lo que quiera y esta genial, mientras no jodas a otro. Sin joder a otro, hoy se trabaja de influencer o de jugar jueguitos. Cualquiera puede hacer lo que quiera y comerse un viaje y esta genial, mientras todavía haya gente que estudie medicina no hay problema.
ND: – ¿Cuándo te diste cuenta que tu pasión era la psicología y no la actuación?
FA: – La actuación es una consecuencia de esa obsesión que tengo por observar a las personas y analizarlo todo. Cuando uno piensa en un personaje se imagina como camina, como reaccionaría, como grita, o que es lo que puede llegar a sentir si lo traiciona un amigo. Mirar a las personas me encanta, observarlas, es eso. Lacan hablaría de un goce escópico, mirar y ser mirado, y fíjate como entra la actuación ahí también, el espectador, el actor que se expone, miradas. No lo puedo evitar, ver observar a las personas es como diseñar personajes, imaginar sus vidas, ver como caminan, imaginar hacia donde van, pensar en porque dicen lo que no quieren decir o piensan lo que jamás dirán.
ND: – ¿Cómo fue que decidiste estudiar?
FA: – Estudiando psicología aprendo a descubrir embusteros. Soy fan de la UBA, banco a muerte la educación pública. Empecé el CBC a los 32 años. Me anoté y empecé a rendir los exámenes sin decirle nada a mi familia ni a mis amigos, para que no me contaminen con sus opiniones y, mientras hacia un personaje chiquito en Educando a Nina, me iba a estudiar biología al camarín. Cuando aprobé todo el CBC les conté.
Mi vieja está feliz, por fin el hijo bohemio va a tener un titulo académico. Estudiar psicología me organiza la cabeza, el tiempo y las emociones.
ND: – Compusiste canciones para películas como “No te enamores de mi”, y en tus redes se te puede ver tocando instrumentos seguido. ¿Qué relación tenés con la música?
FA: – La psicología es una obsesión, la actuación una necesidad interna. La música hoy en día es un disfrute. Cuando me di cuenta de ello le quité exigencia. Toco con mis amigos, no soy Mick Jagger pero le cumple el sueño al pibe de 13 que soñaba con tocar música mas o menos dignamente.
ND: – ¿Cómo viviste el fenómeno de la ficción de Polka “Las Estrellas”?
FA: – La pasé muy bien, me encanta la comedia y mi personaje era con Natalie Pérez que es una gran actriz de comedia, me la hizo muy fácil. Me encanta divertirme en TV. Tuve la suerte de trabajar en producciones muy vistas por el público, tengo un master en bolos con continuidad, y debería abrir una escuela de bolos con continuidad.
ND: – ¿Es cierto que sos muy fanático de Roberto Gómez Bolaños? ¿A alguien más admiras?
FA: – ¡Por supuesto! ¿Vos no? Es el mejor actor de la historia, al día de hoy no puedo entender que a El Chavo del 8 lo interpreta un tipo de 50 años. Tengo un desafío para ustedes: elijan al actor adulto, el que más les guste, de 50 años: puede ser De Niro, Al pacino, el que quieran. Pónganlo a actuar de un niño de 8 años a ver si lo ven como tal. Ni hablar de todo el elenco. Artísticamente admiro a mucha gente, me doy cuenta que los admiro porque los quiero sin conocerlos. Me pasa mas con músicos, Nick Drake, Neil Young, Spinetta, Elliot Smith, etc. Admiro lo genuino, lo que simplemente me conmueve. Sandro era un gran interprete, te generaba una atmósfera tan bizarra como única y verdadera. Me pasa lo mismo con Calamaro que te cuenta unas historias hermosas como si estuviera a tu lado, interpreta con la voz, es un trovador. Luis Miguel y Miguel Abuelo a simple vista se ven dispares, yo los encuentro muy cercanos, ambos genuinos cada uno en lo suyo.
ND: – Últimamente los famosos cocinan o se encierran en TV para trabajar por la falta de ficción nacional. ¿Qué te pasa con eso?
FA: – Siempre me hace un poco de ruido cuando se pone al famoso como sinónimo de actor, salir en una pantalla es consecuencia del trabajo, pero no siempre los actores son famosos ni los famosos se prepararon para actuar. Igual entiendo a lo que vas, y creo que plata, guita, biyuya, todos necesitamos de ese virus encarnado en la sociedad y no me parece justo juzgar la necesidad ni la decisión ajena. Me propusieron entrar a “El Hotel de los famosos” pero nunca fui confirmado.
ND: – ¿Y qué te pasó con la propuesta?
FA: – Francamente (y con mucha angustia), lo dudé porque necesitaba el dinero. Por suerte mi inconsciente fue más sabio y el mismo día, después de la reunión para conocer de qué se trataba el proyecto, me chocó un auto. Chau, quince días de bota y seis meses de kinesiología. Menos mal, ¿Te imaginas cámaras 24×7? Gracias, paso, hubiera mordido banquina. Acepto que me encantaría cocinar en TV porque me encanta cocinar y me gusta la adrenalina de los programas en vivo. Igual reconozco que me encantaría atravesar la experiencia de estar encerrado con desconocidos y la “mirada” 24×7, flashear “1984″, pero no. Soy un explorador de mi humanidad, alguien que le encanta vivir experiencias extremas pero hacerse famoso por el simple hecho de someterse en TV a la exposición sin un fin artístico, no creo que tenga mucho que ver con ser actor.
