Luis Novaresio y Braulio Bauab vivieron uno de los momentos más felices y emocionantes de sus vidas
Luis Novaresio, recién casado. Este jueves al mediodía se casó Luis Novaresio con su pareja, Braulio Bauab, con promesa de una mega fiesta hacia marzo, cuando la expectativa es que pase la pandemia.
Novaresio blanqueó su noviazgo con el empresario inmobiliario en septiembre de 2019, y la pareja se fue afianzando cada vez más. Si bien Luis había anunciado días atrás que quería hacer la boda en marzo del año que viene, finalmente sorprendió a todos y se casó hoy.
Con las alianzas matrimoniales en su poder, pero sin mostrarlas ante las cámaras “porque es de mala suerte”, compartió su felicidad en vivo los medios que estaban en la vereda aguardándolos. “Vamos a hacer la fiesta en marzo, hoy es por Zoom”, contó. A su turno, Braulio halagó a Luis mientras tenía a su hija, Vera, en brazos: “Estoy muy feliz, muy enamorado de este señor, con el que elijo casarme y compartir mi vida. Mi futuro y una casa de campo para hacernos viejitos”.
Al salir tras dar el sí, el periodista y su flamante hablaron con la prensa. “Estoy muy feliz. No paré de llorar literal durante toda la ceremonia”, confesó el periodista. Novaresio aseguró que un “esposo es mucho más que un pariente” y que Braulio “es mucho más de lo que había conocido hasta ahora” y que lo hacía muy feliz.
Finalmente, Novaresio contó que esta noche harán ceremonia judía de romper las copas vía Zoom pero que, si “todo está mejor”, en marzo organizarán una súper pool party con amigos y gente cercana.
Recordemos que hoy es un día especial porque se cumplen 11 años de la sanción de la Ley de Matrimonio Igualitario en la Argentina, que fue el décimo país del mundo en consagrar la unión civil de personas del mismo sexo. El periodista escribió una nota muy sentida para Infobae donde conto por qué se quería casar.
“Me quiero casar, primero y esencial, porque puedo decir que vivo el amor de mi vida. Y aquí, no hay mucho más para escribir o pensar. Basta mirar la integridad de mi futuro esposo. Sólo mirarlo a los ojos. Estar enamorado es un aluvión imparable de ganas de compartir con un par el artesanal ejercicio de la vida diaria, de ese claroscuro que es la vida diaria. Y eso merece celebración”, declaró.
“Me quiero casar porque es una fiesta. Y en ella, virtual por el coronavirus, real cuando se pueda, quiero verle las caras a los que quiero para contagiar ese amor o agradecerles el de ellos, o fundirlos en el mío. (…) Me quiero casar porque puedo. Ahora sí“, finalizó.