
Joaquín Berthold es uno de los actores más versátiles de su generación, y en la obra de teatro que protagoniza “Vincent, el loco rojo“, se entrega en cuerpo y alma. Pocas veces se vio a un artista tan comprometido con cada palabra que pronuncia arriba del escenario del teatro El Grito los sábados a las 20:30. El espectáculo habla de la vida de Van Gogh y su irrupción en el arte.
Aparece para sumar a su extensa y reconocida obra, al hombre que fue Vincent, descarnado, frágil, sensible, violento y lleno de ilusiones, para contar sus desamores, su pasión por la pintura, sus traumas de infancia y la frustración por no haber podido vender en vida, viendo que hoy es uno de los artistas más reconocidos de la historia. La obra habla del éxito y el fracaso, de las distintas maneras de ver la vida; pero sobre todo refleja el lado B de un artista tan genial como complejo.
La puesta en escena es exquisita, y el espectador queda totalmente conmovido no solo con la sublime actuación de Berthold, sino también con el mensaje que deja el show. Por momentos parece una clase magistral de teatro, por otros es tan real como crudo. En “Vincent, el loco rojo” se habla mucho de la vida, pero también demasiado de la muerte. Los límites, la violencia y el amor predominan en gran parte del texto. Una obra para sentarse en la butaca y comenzar a disfrutar.