Los abogados que llevan adelante el caso de Facundo Astudillo Castro recibieron intimidaciones por parte de la Policía Bonaerense. Además, aseguran que otros testigos de la causa y amigos de la familia Castro también fueron amedrentados.
Leandro Aparicio y Luciano Peretto son los abogados que representan a la familia de Facundo Astudillo Castro, el joven cuya desaparición seguida de muerte tiene como principal sospechosa a la Policía Bonaerense. Durante las últimas semanas, ambos letrados dieron cuenta de las intimidaciones que recibieron por parte de la fuerza provincial.
Primero fue un patrullero que hacía “guardia” en la puerta de la casa de Luciano Peretto. Ahora, Leandro Aparicio recibió una intimación a través de una carta documento por parte del comisario inspector Miguel Ángel Reynoso, quien lo amenazó con denunciarlo penalmente si no se retracta públicamente respecto de sus “agravios” contra los policías. Durante uno de los procedimientos en el marco de la causa que investiga la muerte de Facundo, además, el subcomisario Pablo Reguillón también había amenazado a Peretto.
Reynoso, quien se encuentra retirado, intimó a Aparicio a que “en forma inmediata” a partir de la recepción de la carta “se abstenga de realizar actos o expresiones que resulten ofensivas y agraviantes para los integrantes de las Policías de la Provincia de Buenos Aires, ya sea en actividad o en situación de pasividad, bajo apercibimiento de considerar su comportamiento incurso en los delitos de Calumnias e Injurias conforme los alcances de los artículos 109 y concordantes del Código Penal”.
“Vencido plazo, ante silencio, negativas y/o evasivas, de continuar con su inadmisible proceder, actuaré en consecuencia por ante el fuero en lo Criminal y Correccional y fuero Civil y Comercial requiriendo medidas cautelares, en resguardo de los agravios y perjuicios ocasionados”, advirtió Reynoso en el documento. El comisario asegura ser “secretario general de la Asociación Profesional Policial Buenos Aires (APROPOBA)“, y espera que Aparicio se rectifique por carta y “por los medios periodísticos y por las redes sociales” que el letrado utilizara, “en relación a todas y cada una de las menciones que infundadamente llevara a cabo, en un plazo de 48 horas”.
En su cuenta personal de la red social Facebook, Leandro Aparicio hizo su descargo. “Como le dice Escohotado a Andres Calamaro: ‘No hay que confundir la valentía con la temeridad‘. Uno no quisiera terminar en un cementerio clandestino de la bonaerense acompañada de cadáveres sin identificar como Facundo. Ni ser empalado como Natalia Mellman, ni asesinado y desaparecido por negarse a robar como Luciano Arruga ni desaparecido en una comisaria como Miguel Bru. Ni que les pase nada a sus familiares queridos. Pero en el último lugar en el que les podría temer seria en este contexto. No voy a gastar 500 pesos ni perder media hora en ir al correo para explicarle los alcances del fallo Kimel. Lo importante que es meter presos a los que asesinaron a Facundo“, escribió el letrado.
Por su parte, Peretto aseguró que ambos abogados efectuarán una denuncia federal por todas las amenazas e intimidaciones que vienen recibiendo por parte de la Bonaerense. Además, Aparicio reveló que varios testigos de la causa y amigos de Facundo Castro fueron también víctimas del accionar de la fuerza: “le pasó a algunos amigos de Facundo esta persecución policial. Que un patrullero les frena ante su casa, que los siguen, también en autos particulares“.
“Yo la verdad que tengo miedo”, confesó Peretto. “Yo no elegí inclinar esta causa con Leandro y Cristina (Castro, la madre de Facundo) contra la Bonaerense. Es el único camino que teníamos. La semana pasada hice una denuncia contra un policía que me dijo ‘cuando termine esto ya sé qué hacer con vos’“, detalló.