Las delegaciones de ambos países se reunieron en la frontera entre Ucrania y Bielorrusia, aunque resaltan que hay “pocas expectativas” sobre el resultado de este encuentro
Para intentar ponerle fin a la invasión rusa en Ucrania que ya lleva cinco días, las delegaciones de ambos países comenzaron hoy las negociaciones en el puesto de control Alexandrovka-Vilcha, en la frontera entre la segunda de las naciones mencionadas y Bielorrusia.
Según transmite en directo la agencia oficial bielorrusa Belta, entre los representantes ucranianos están el ministro de Defensa, Oleksiy Reznikov y el alto asesor de la presidencia, Mijailo Podoliak. Ambos llegaron esta mañana al lugar de las negociaciones para exigir un salto al fuego “inmediato” y la retirada de las tropas rusas, anunció la Presidencia de Ucrania, a la vez que el presidente Volodimir Zelenski pidió que su país sea incorporado de manera urgente a la Unión Europea.
El mandatario dijo que, en lo personal, tenía “pocas expectativas” sobre el resultado de este encuentro.
El principal problema entre las partes es que el Kremlin no quiere revelar su posición. “No voy a anunciar nuestras posiciones. Las negociaciones deben hacerse en silencio”, explicó el vocero Dmitri Peskov.
A su vez, quien también se pronunció fue Vladimir Medinski, negociador ruso y consejero del Kremlin: “Cada hora que el conflicto de prolonga, ciudadanos y soldados ucranianos mueren. Nos hemos propuesto llegar a un acuerdo, pero tiene ser en el interés de las dos partes”. El presidente ruso, Vladimir Putin, había afirmado al iniciar la ofensiva que iba a “desmilitarizar” y “desnazificar” Ucrania, y acusó a Kiev de haber orquestado un supuesto “genocidio” de la población rusoparlante.
En el quinto día de la ofensiva, Moscú afirmó que quería un “acuerdo” con Kiev durante el diálogo de este lunes, en un momento en que la invasión parece encontrar más resistencia en el terreno.
