
Martín Lobo resultó ser el tercer expulsado de Survivor Expedición Robinson. El bombero quedó afuera del equipo norte por el voto de sus compañeros, sorprendiendo a sus rivales ya que era el líder del team. “El último día me sentí muy mal, imagino que fue una mezcla del hambre y calor. Irme fue lo mejor para el equipo… Llegó un momento en que todos querían irse, porque de verdad es duro. Y yo ya no podía más, estaba muy cansado y ellos vieron que no iba a durar mucho”, destacó el jugador entrevistado en La Nación.
“Soy bombero retirado del cuerpo de la Ciudad, con 28 años en actividad de los cuales 20 estuve en el grupo de rescate. Mi actividad toda mi vida fue nadar y bucear porque soy buzo de rescate y salvamento. Me conozco todas las alcantarillas y cloacas del país porque estuve en todos los casos de la justicia federal. En incendios, inundaciones, tragedias, desde la explosión de la AMIA hasta Río Turbio, Cromañón, el tren de Once. Me salió el retiro en el 2019 y cuando me anoté en el reality ya hacía unos meses que estaba descansando”, reveló el hombre que conoció a Giselle, otra de las jugadoras, sobreviviente de Cromañón.
Sobre su jugado rol, Lobo agregó: “No es miedo a morirse, porque tener miedo es lo normal, sino serías un loco. Pero sabíamos que íbamos jugados porque había mucha temperatura, tanta que se nos rompieron dos cámaras térmicas. Calculo que había una temperatura de 300 grados. Fue una situación límite”.
“Creo que Cromañón fue la tragedia que más sufrí, porque había muchos chicos muertos en el lugar y nos superó, no porque fuéramos pocos, sino porque no podíamos hacer más. Daba pena porque eran muchos chicos que murieron aplastados por querer salir todos juntos. Llegar a los chicos nos costó porque había mucha gente en las salidas”, cerró Martín.