Los integrantes de La Fraternidad fueron convocados a una reunión urgente por el ministro Alexis Guerrera a fin de solucionar el paro que afecta a los servicios de pasajeros y de cargas de todo el país.

Mientras se desarrolla el paro nacional de trenes por 24 horas impulsado por el gremio de La Fraternidad, este martes se llevará a cabo una reunión en el ministerio de Transporte de la Nación entre los referentes del Sindicato de Conductores de Trenes, encabezados por su líder Omar Maturano, y funcionarios de esa cartera ministerial con el objetivo de encontrar una solución a este conflicto.

Según el gremio, la medida de fuerza fue lanzada “en defensa de la industria ferroviaria y los puestos de trabajo”, y afecta a los servicios de pasajeros y de cargas de todo el país.

Como se recordará, la medida de fuerza había sido dispuesta el 21 de este mes por el Secretariado Nacional del gremio, y fue ratificada en las últimas horas por Maturano, y se cumple en todo el país.

En este sentido, y a fin de atemperar la medida entre los usuarios del servicio, el Ministerio de Transporte pidió a las empresas de líneas de colectivos urbanos y suburbanos que refuercen sus frecuencias. En el caso puntual del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) el paro afecta a casi un millón de personas, que diariamente se dirigen a la ciudad de Buenos Aires.

Paro de trenes: reunión en Transporte para destrabar el conflicto
Descarrilamiento a 10 km de Olavarria, desató el conflicto gremial.

La Fraternidad no duda en defender a la industria ferroviaria y los puestos de trabajo, vulnerados por la decisión judicial de suspender los servicios entre Buenos Aires y Bahía Blanca por un descarrilamiento. La organización sindical también ratifica el estado de alerta y movilización“, enfatizó el dirigente, quien adelantó que continuarán los paros y el quite de colaboración en la actividad.

Maturano sostuvo en un video y en un documento de prensa que la industria ferroviaria “es de forma permanente atacada, en este caso por la justicia“, y añadió que el gremio también rechaza “las irregularidades producidas en la compra fantasma de pasajes en servicios de la actividad, que agotan las disponibilidades y transfieren pasajeros al sector del autotransporte”.

El ferrocarril está siendo atacado y, prueba de ello, es lo que ocurrió durante el asfaltado de vías y ante la negativa de algunos intendentes a que los servicios se detengan en sus localidades, como ocurre en Chascomús, por ejemplo”, afirmó.

Maturano embistió contra la decisión de algunos jueces, que prohibieron “la circulación ferroviaria entre Buenos Aires y Bahía Blanca, lo que beneficia a empresas automotoras que reaparecieron en el mercado a partir de medidas tendenciosas que golpean al tren, en un contexto nacional en el que fallecen más de 5 mil personas en accidentes de tránsito carretero”, enfatizó el sindicalista.

Para Maturano, “la clausura de servicios ferroviarios en ausencia de pericias técnicas previas afecta de forma económica a los sectores populares, que utilizan el ferrocarril por sus tarifas sociales”, y aseguró que a fin de preservar la seguridad “la justicia debe exigir a las empresas la reparación de infraestructura y material tractivo y rodante, ajustando a derecho la responsabilidad patronal”.

La justicia “optó por lo más fácil, es decir, una resolución contraria al sistema ferroviario”, dijo Maturano, quien sostuvo que “llama la atención que los organismos de control no funcionen a partir de la inexistencia de una Ley Federal de Transporte, que La Fraternidad pregona desde hace más de 15 años”.

El malestar también se relaciona con “las conductas de algunos gobiernos provinciales que, violentando la ley, se adueñan de territorios ferroviarios propiedad de la Nación y utilizan terrenos para variados fines y no para construir viviendas para el personal, que no tiene casa propia en un 60%”, dijo.

Algunas comunas de forma irregular asfaltaron vías en los pasos a nivel, lo que impide que los trenes paren en las estaciones de esas localidades. Existe una embestida contra la actividad. A ello se suma la compra fantasma de pasajes, lo que agota las comodidades para derivar pasajeros al autotransporte”, denunció.