Un grupo de pequeñas molineras se lo solicitaron al nuevo secretario de Comercio, Guillermo Hang, y advirtieron que su sector “está en riesgo por la interrupción en la cadena de pagos”.

Las Pymes Molineras nucleadas en APYMIMRA le reclamaron al nuevo Secretario de Comercio Interior, Guillermo Hang que suspenda el Fideicomiso del Trigo porque el sector “está en riesgo por la interrupción en la cadena de pagos que generó en el mercado”.

En un comunicado de prensa, señalaron que la entidad manifestó “en varias oportunidades su rechazo” al Fideicomiso del Trigo (FETA), posición fue compartida por las cámaras CIM y FAIM.

“Es decir toda la molinería está en desacuerdo con la herramienta pero tras la renuncia de Feletti (Secretario de Comercio saliente) increíblemente el FETA sigue vigente”, se indicó.

“Solo tres molinos adhirieron al Fideicomiso para ofrecer “harina subsidiada”. Uno con baja incidencia en el mercado, y los otros dos, en cambio, pertenecientes al único grupo molinero que desde el inicio manifestó su adhesión al sistema y que ya cobró casi 1.300 millones de pesos a través del Fondo. Este grupo está en plena instancia de concurso de acreedores, y tiene un pasivo de 1.320 millones de dólares”, explicó Asociación de Pequeñas y Medianas Industrias Molineras de la República Argentina

“Explicamos que los molinos pequeños no podemos vender harina más barata que el costo real y esperar esta diferencia mediante el subsidio del FETA. Ocurre que no tenemos márgenes de rentabilidad y el capital de trabajo suficiente para esperar el pago diferido, que no sabemos cuándo llegará. Repetimos nuevamente que el FETA no cumple con el objetivo de bajar el precio del pan para los sectores más vulnerables, y genera situaciones contrarias al objetivo solidario de su creación”.

Según el comunicado, “durante la primera semana del FETA, impulsado por el Gobierno, el grupo molinero que vendió harina subsidiada (a un precio menor del mercado) produjo un fuerte desbalance y generó gran irritación, fijando además nuevas condiciones comerciales a los panaderos”:

1) Saldar todas las deudas anteriores a la compra de harina subsidiada y mantener las cuentas corrientes en cero.

2) Reducir los plazos de cobranza de 20/30 días (lo habitual) a 7/10 días.

“Esta práctica redujo los fondos disponibles de los panaderos para el pago a molinos pymes que mantienen su modalidad de venta, con plazos de pago a 30 días, efectivos en la entrega siguiente de harina. Los panaderos para poder comprar la harina subsidiada (más barata) deben priorizar los pagos a ese proveedor y postergar los pagos a otras empresas”.

Según APYMIMRA ese desvío de fondos generará “derrumbe de ventas de los molinos pymes, ruptura de la cadena de pagos, reducción de actividad o parada de plantas y paralización de las economías regionales, ya que los molinos pyme son la principal fuente de trabajo directo e indirecto de sus pueblos”.

Por último, desde la entidad se insistió “en la necesidad de reunirnos con el secretario Hang para explicarle en detalle los daños concretos que ya está produciendo el FETA y que derivarán en una crisis económica y social mayor. A la ya compleja situación de falta de empleo y pobreza que atraviesa el país, se le sumarán miles de desempleados producto del cierre de los molinos, lo cual va en contra del declamado federalismo y del cuidado de las economías regionales”.

“Por todo lo expuesto, nos ponemos a disposición para buscar herramientas más idóneas y efectivas, como la Tarjeta Alimentar (ayuda directa a los sectores necesitados), para el bien de todos los argentinos y salvaguardando a las economías regionales de los pueblos del interior del país”, finalizó el comunicado.