En una histórica elección en Estados Unidos, el presidente Donald Trump se proclamó ganador durante la madrugada y pidió detener el escrutinio, mientras que Joe Biden calificó de “indignantes” los dichos de su rival.

Vamos a tener que ser pacientes hasta que esté terminado el duro trabajo de contar los votos, y esto no se termina hasta que cada voto se cuente, hasta que se cuenten todos los votos”, manifestó el candidato a presidente por los Estados Unidos, Joe Biden, y esa frase provocó una fuerte respuesta de parte de su rival, Donald Trump.

Primero, el actual presidente de Estados Unidos se hizo sentir en la red social Twitter: “estamos arriba por mucho, pero están tratando de robarnos la elección. Nunca dejaremos que lo hagan. ¡No se pueden emitir votos una vez que las mesas se cerraron!”, escribió.

Este tuit fue censurado por la red social Twitter, que publicó sobre el mensaje del presidente Trump: “Alguna parte o todo el contenido compartido en este Tweet ha sido objetado y puede ser engañoso respecto de cómo participar en una elección u otro proceso cívico”.

Luego de ese mensaje, desde la Casa Blanca, nuevamente Trump dio un fuerte discurso: “no queremos que siga la votación. Íbamos ganando y de repente se cae todo. Es un momento muy triste, una vergüenza para el país”, disparó.

La respuesta de Biden a los dichos de Trump llegó unas horas después, calificando como “indignantes” y “sin precedentes” los dichos del actual presidente de Estados Unidos.

El escrutinio lento, producto de la gran cantidad de votos realizados por correo debido a la pandemia de coronavirus, provocó que los estadounidenses se despierten sin saber todavía quién será el próximo presidente.

Por estas horas faltan definirse algunos estados clave, como Nevada, Georgia y Carolina del Norte, Pensilvania, Michigan y Wisconsin.

El exvicepresidente Biden contaba por estas horas con 227 de los 270 votos que se necesitan en Estados Unidos en el Colegio Electoral para ser proclamado presidente, mientras que Trump sumaba 213.