La cifra es millonaria es la que exige Anabela Ascar para abandonar la mansión de Héctor García, en donde está atrincherada desde el fallecimiento de su pareja
Sigue la polémica con Anabela Ascar y la casona de Belgrano que era de Héctor Ricardo García. Ascar siempre se resistió a dejar el caserón de Belgrano, pero este último tiempo se habló de negociaciones. La conductora siempre quiso que esa casa fuera de ella, ya que la une con esa casona un sentimiento que ni siquiera había sentido delante de las cámaras cuando conducía el mediático programa de Crónica que la llevó a la fama.
Esa mansión de Belgrano es su prisión porque allí está atrincherada desde la muerte de García. Los familiares de García quieren que deje la casa, y ella, para eso, pretende que los García le den 10 millones de pesos (antes pedía 24) a cambio de irse de la casa que hoy está en ruinas y abandonada. Cuando Héctor Ricardo García murió, en 2019, “a ella le correspondieron dos departamentos y una chacra en la provincia de Buenos Aires”, comentaron en “A la tarde”, el programa que conduce Karina Mazzoco por América TV. Sin embargo, ella quiso más.
La casa tiene la reja de ingreso al garaje cerrada con candado y el jardín del frente descuidado, tiene 1500 metros. Dicen que el estado de deterioro de la propiedad es importante. Está en ruinas por falta de mantenimiento: el pasto está crecido y se puede ver detalles de pintura descascarada. Se encuentra cerca de los lagos de Palermo, en una zona muy tranquila, que ostenta un mix entre casonas muy coquetas con emprendimientos fabriles. Héctor García falleció en junio de 2019.
La afamada conductora de Crónica TV, que fue pareja del empresario durante 22 años, y con quien firmó una unión civil, siempre desistió y resistió dejar la propiedad. La rubia continúa residiendo en ese espacio, aunque afronta feroces peleas judiciales, dado que la hija de García, Elena, considera que no es heredera. Estarían pidiendo por ella un millón de dólares por el mal estado en el cual se encuentra, cuando por ubicación y metros cuadrados tendría que valer el doble.
Anabela vive allí y no sale para nada. Está acompañada de un perro, un gato y su madre. Ya no tiene personal doméstico porque no cuenta con solvencia económica. Además de ser una casona de dos plantas, tiene un parque de grandes dimensiones. El diseño fue pensado para que todas las habitaciones se conecten con el jardín. La mansión que el empresario de medios tuvo en vida valía el doble de lo que ahora pide. Una pulseada que ya peleó batallas judiciales y que promete terminar con desalojo.
El conflicto escaló a diversas instancias, pero la animadora de TV siempre resistió su postura y se mantiene habitando la propiedad. Además, muchos registros fotográficos dan cuenta de un deterioro en la estructura, producto de una falta de mantenimiento. La hija del empresario fallecido emprendió un accionar más intensivo para lograr tomar posesión de la casona, pero se topó con una imposición de Anabela, que parece solicitó una cifra de dinero elevada para retirarse de esos aposentos y liberar el inmueble.
Todo surgió de la información brindada por Débora D’Amato. La panelista aseguró: “La semana pasaba renegoció porque no había respuestas. Vamos a decir ‘habría pedido’, para ampararlo legalmente, porque la fuente es cercanísima. Habría pedido 24 millones de pesos para irse y como no le dieron pelota, ella se comunicó con la hija y le dijo ‘10 millones’”.