El Sumo Pontífice volvió a referirse al aborto y dijo que  es “un homicidio”.

El Papa Francisco sentenció; “Quien aborta asesina, es así”, mientras volaba este 15 de septiembre en avión desde Eslovaquia, de regreso a Roma.

La comunión no es un premio para los perfectos”, declaró el Papa Francisco luego de decir que el aborto “es más que un problema, es un homicidio. Quien aborta asesina, es así”, sentenció sin vueltas.

El Sumo Sacerdote ha argumentado que los libros de embriología explican que a las tres semanas de la concepción ya están todos los órganos en su lugar, por lo que, en su opinión, ya es una vida humana que debe ser respetada. Después se ha hecho dos preguntas.

¿Es correcto matar una vida humana para resolver un problema? (…) Segunda pregunta: ¿es correcto contratar a un sicario para resolver un problema? (…) Por eso la Iglesia es tan dura con este tema, porque si acepta esto es como aceptar el homicidio cotidiano”, concluyó.

El líder de los católicos hizo estas declaraciones a quienes lo acompañaban en el vuelo rumbo a Italia, y fueron pronunciadas en el contexto de la solicitud de algunos obispos de Estados Unidos que pidieron negar la eucaristía al presidente Joe Biden por haberse pronunciado a favor del aborto, e instó a los obispos a abordar el tema como pastores y no como políticos.

El Papa Francisco en el vuelo donde habló del aborto

Nunca he rechazado dar la eucaristía a alguien”, comentó luego de que obispos de Estados Unidos pidieran que se negara la comunión al presidente Joe Biden por estar a favor del aborto. El tema de la legalización del aborto sigue siendo un gran problema en varios países y una gran preocupación en el Vaticano.

En Estados Unidos, el presidente Joe Biden criticó a principios de septiembre la negativa de la Corte Suprema de bloquear una ley de Texas que prohíbe el aborto después de seis semanas de embarazo.

A fines de 2020 Argentina se sumó a la lista de países que aprobaron la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo en las primeras semanas de gestación. No fue ésta una buena noticia para el Sumo Pontífice, sobre todo viniendo de su país de nacimiento.