Son un segmento de la sociedad que quedó marginado y que no se siente representado por ningún partido político.

Luego de las PASO, algunos analistas señalaron que el sentimiento de la falta de representación de este segmento fue crucial. La caída sistemática en la pobreza, de un sector que en otras épocas tuvo otro poder adquisitivo mejor y de mayor percepción económica que en los días que corren, fue crucial a la hora de votar. Entre 2011 y 2012 la tasa de pobreza bajó del 28% al 25% aproximadamente. Luego, desde ese periodo a la actualidad, la tasa comenzó a elevarse nuevamente y alcanzó 15 puntos porcentuales extra a los 25 que ya tenía de base. Esta cifra equivale a más de seis millones de habitantes.

El aumento de este sector se explica por la caída de la clase media, que se vio aún más afectada por la pandemia. Las clases medias están perdiendo peso en la Argentina. Por su parte, el Estado asiste a los sectores más precarios, y a veces, a la clase media baja que está al límite de la pobreza”, explicó en Perfil el Director del Observatorio de la UCA, Agustín Salvia. El indicador no es positivo, ya que si esta clase socio-económica crece es un señal de progreso y si se achica es una señal de subdesarrollo.

En diez años, seis millones de personas de clase media cayeron en la pobreza

Las características de la clase media:

En la estructura social argentina, hay un 25% de clase media alta. Dentro de este porcentaje hay un 5% que es alta y son empresarios, accionistas, familias adineradas que a pesar de las crisis económicas no ven afectado su capital, y están en cierta fase de salida porque mandan a sus hijos al exterior. Después hay un 40% de sectores que son de clase media pero son heterogéneos. En este punto se dan dos fenómenos.

Está el sector que se empobrece pero sobrevive. Se empobrecen porque no puede mantener la medicina prepaga, deben cambiar a sus hijos a la escuela pública, tienen que suspender su mudanza o su inversión, ya no tiene capacidad de ahorro. Se defienden y sobreviven ante las crisis económicas del país. Son los taxistas, monotributistas, bancarios, técnicos, empleados, pequeños comerciantes. Se focalizan en zonas urbanas, el primer cordón de centros urbanos, las capitales.

Por otro lado, están los que ya tuvieron que hacer el ajuste con las crisis vividas en los últimos 10, 15 años. Este segmento quedó marginado y son los que están cayendo en la pobreza. Esta caída está asociada a la pérdida de los ingresos, la inflación alta, los salarios que no alcanzan. “Es un proceso de deterioro. En 1970, la pobreza era del 10% y teníamos una clase media del 80%, 90% aproximadamente. Sin embargo, se estropeó en las últimas décadas”, detalló el sociólogo Salvia. La clase media juega fuerte en las elecciones 2021, los resultados de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias del pasado 12 de septiembre, una de las incógnitas que surgió es qué rol juega la clase media.

Existe un sentimiento de falta de representatividad. Analistas políticos señalaron que son el sector de la sociedad más golpeado y que menos recurrió a las urnas. Por su parte, como sociólogo y Director del Observatorio de la UCA, Agustín Salvia, explicó que desde el punto de vista político la clase media es muy volátil en su elección, ya que castiga y premia. “Son quienes apoyaron a Cristina Kirchner con el 44% en 2011, le retiran su apoyo y se lo dan a Mauricio Macri en 2015, y luego, se lo quitan a Macri y se lo vuelven a dar al peronismo en 2019”, manifestó.

Hay un 15% o 20% que es la clase media baja que no encuentra un horizonte de salida. No tienen una representación ideológica, sino preferencias, evaluaciones o juicios ajustados a conveniencia o interés. Los votos de esta población terminan definiendo”, agregó. “Hay cierto hartazgo comunitario. El vértice del ausentismo electoral y de la derrota fue la clase media y media baja que están por fuera de las ayudas sociales habituales como la tarjeta alimentar, el IFE; pero también están muy lejos de los salarios de 170 mil pesos que se ven beneficiados con la suba en la deducción al Impuesto a las Ganancias.

Son salarios que van de los 45 mil a los 55 mil pesos y están todos por debajo de la línea de pobreza. Informales, cuentapropistas, autónomos, formales privados que llegan a los $33.000”, expresó el director de la consultora Equis, Artemio López. El analista Carlos Campolongo señaló que el sector que Cristina Kirchner pone como prioridad son los de la tercera sección electoral de la Provincia de Buenos Aires y no a la clase media.

“Para conceptualizarlo, si la cuestión es seguir destruyendo a la clase media, me da la impresión que esto no tiene que ver con la concepción de una sociedad integrada. Entonces, eso va a favorecer más el clientelismo político y me parece que eso deteriora más al oficialismo” explicó. “De todas maneras estimo, que por lo visto hasta ahora, no les interesa ocuparse de la clase media. A su vez, esto tiene la contrapartida de que contribuye a la polarización que tiene que ver con estados de ánimo, con comportamientos electorales. No hay nada más que ver el mapa y ver los comportamientos de los sectores urbanos donde generalmente se emplaza la clase media y media baja”, finalizó.