Los familiares de la modelo y de las otras víctimas del cirujano compartieron la propuesta en redes sociales.
Víctimas de mala praxis, vecinos, amigos y admiradores de Silvina Luna se congregaron esta tarde frente a la casa de Aníbal Lotocki para pedir justicia por todas las víctimas de su mala praxis. El objetivo es exigir la encarcelación del profesional, que se haga justicia, no sólo por Silvina Luna sino también por Mariano Caprarola, Cristian Zárate y Romina Vega. Lotocki está acusado de mala praxis, y la protesta es para pedir justicia por las víctimas fatales del médico.
“Soy vecino de este barrio y no lo queremos acá, es un asesino”, dijo a C5N un vecino que se acercó hasta el lugar con su esposa. “Este hombre no puede estar en la casa, tiene que estar en la cárcel”, denunció otra vecina. “Queremos Justicia, esta chica está bajo tierra y Lotocki está en su casa”, dijo otro de los manifestantes que dijo ser víctima de una mala praxis médica. Mientras tanto, el médico se encuentra recluido en su hogar, con custodia policial en la puerta.
Con respecto a la marcha, cuya consigna es que sea pacífica, la familia y amigos más cercanos de Silvina Luna no asistieron.
La autopsia de Silvina Luna
La autopsia al cuerpo de Silvina se realizó este lunes 4 de septiembre. Según las palabras de Burlando, lograron “sacar mucho material, de los glúteos y de las piernas”. Además, el abogado agregó que este componente -que se cree que es metacrilato- estaba extendido por varias partes del cuerpo. “Se llevó adelante preservación de los riñones y demás órganos y se extrajo mucho material que oportunamente fuera inyectado a Silvina, que será motivo de pericia”, agregó el letrado.
Él mismo había sido el representante de la modelo en el juicio que concluyó el año pasado con la condena de Lotocki a cuatro años de prisión en suspenso y cinco de inhabilitación por “lesiones graves” en perjuicio de su clienta, de Stefanía Xipolitakis, Gabriela Trenchi y Pamela Sosa. Burlando, además, luego de la muerte de Silvina lo denuncio por homicidio, ya no como su defensor sino como un ciudadano común.