Un juez determinó que Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, deberá usar barbijo en los lugares públicos o será multado.

Con más de 51 mil muertos, Brasil es el segundo país con mayor cantidad de fallecidos debido a la pandemia por coronavirus. Su presidente, Jair Bolsonaro, calificó en una ocasión al virus como “una gripecita”. Desde entonces, participó de manifestaciones, salió a conversar con vendedores ambulantes y hasta visitó amigos y familiares sin usar barbijo.

Debido a estas conductas inapropiadas, el día de hoy el juez federal Renato Borelli determinó que Bolsonaro debe utilizar barbijo en los lugares públicos de la capital, y que en caso contrario será multado con 2.000 reales (unos 500 dólares) por día.

“La conducta del presidente de rechazar usar máscaras en lugares públicos muestra un claro objetivo de no cumplir las reglas impuestas por el gobierno de Brasilia”, dice el fallo. El uso de barbijos es obligatorio en Brasilia desde el 30 de abril, pero Bolsonaro usa sus salidas en medio de la pandemia para incentivar a la población a romper la cuarentena y “salir a trabajar”.

El gobierno de Brasilia multó la semana pasada al ex ministro de Educación bolsonarista, Abraham Weintraub, por no usar barbijo. El funcionario se manifestó a favor de encarcelar a los 11 miembros del Supremo Tribunal Federal (STF), la máxima instancia judicial de Brasil.

Weintraub, investigado por golpismo, renunció al cargo el viernes pasado y viajó a Estados Unidos tras ser designado como consejero del Banco Mundial. Su llegada a Miami generó mucha polémica, porque Washington tiene cerrado el acceso de brasileños provenientes de Brasil a su territorio.