Reilly Opelka impuso su fuerza ante Schwartzman y avanzó a los octavos de final del certamen.

El estadounidense Reilly Opelka (39°) puso fin a la aventura de Diego Schwartzman en el Masters 1000 de Cincinnatti versión Nueva York, al derrotarlo por 6/3 y 7/6(4) en una intensa lucha que se extendió por una hora y 42 minutos. No fue buena la actuación del Peque, provocada en buena medida por su adversario, que no le dio ritmo y lo obligó a jugar incómodo durante la mayor parte del encuentro. Opelka, un gigante de 2.11 metros de altura, basa su juego en su potente servicio y en intercambios cortos desde el fondo de cancha, estrategia que le proporcionó buenos réditos ante un confundido Schwartzman.

Opelka se medirá en el siguiente turno con el italiano Matteo Berrettini (8°), por los octavos de final del Masters 1000 de Cincinnati. El itálico se sacó de encima al finlandés Emil Ruussuvuori (100°) por 6/4 6/7(3) y 7/5, en una pulseada en la que tuvo que mostrar su chapa de top ten para salir airoso. Volviendo a Schwartzman, admitió en la conferencia de prensa (por zoom) que “jugó horrible” y que se focalizará en la gran cita que se viene: el US Open, a disputarse en la misma sede.

Una de las sorpresas del día la brindó Andy Murray (129°), el escocés dejó en el camino a Alexander Zverev (7°), uno de los candidatos al título, por 6/3 3/6 y 7/5, en un choque que tuvo un tercer set muy cambiante, en el que prevaleció la experiencia del ex número 1 del mundo, de regreso en el circuito después de 9 meses de inactividad. Mayor asombro causó la paliza que le propinó el serbio Filip Krajinovic (32°) al austríaco Dominic Thiem (3°), segundo favorito en Cincinnati. El balcánico se impuso por 6/2 y 6/1, en apenas una hora de desarrollo.