Los mejores tenistas ven complicado el ingreso a Europa post US Open.

El US Open continúa en el ojo de la tormenta, a pesar de que la USTA confirmó su realización. La mayoría de los jugadores top no ven garantías de poder trasladarse en forma rápida a Europa y continuar con su agenda deportiva, una vez concluida sus respectivas participaciones en el Grand Slam estadounidense. Como está planteado el tema, los mejores tenistas ATP y WTA ven difícil disputar el torneo de Roma, tanto el Masters 1000 masculino como el Premier 5 femenino, por la cuarentena a la que deberían someterse después del US Open. La competencia en el Foro Itálico es la escala previa a Roland Garros, y los más encumbrados no quieren perdérsela.

El US Open sufrió, en los últimos días, las impactantes bajas del español Rafael Nadal (número 2 de la clasificación ATP) por el lado de los hombres, como también la de Ashleigh Barty (líder del ranking WTA). Para colmo, a la australiana se le sumaron la belga Kiki Bertens y la ucraniana Elina Svitolina, dos top ten que renunciaron a la importante cita en la Gran Manzana. La mayoría de los competidores dentro del top 20 no ven con buenos ojos perderse el evento romano, por la cuarentena que deben cumplir después de participar en Nueva York.

La reciente suspensión del Mutua Madrid Open resultó otra piedra en el zapato para el US Open, porque desde la ATP y la WTA analizan alargar una semana el certamen de Roma, tomando los siete días vacantes que dejan los madrileños y ampliar los cuadros principales de 56 a 96 participantes. Esto dificulta aún más la presencia de los mejores jugadores en Flushing Meadows, sobre todo los europeos y los sudamericanos. Por supuesto, cada caso es para desglosar, pero muchas de las principales raquetas de ambos circuitos preferirían focalizarse en la (mini) temporada de canchas lentas del Viejo Continente. Se viene otro dilema a resolver para la USTA, ATP y WTA.