Los dirigentes Millonarios reconocieron que incumplieron el protocolo previsto para el regreso de los hinchas al estadio. Argumentaron que no funcionaron los controles en los molinetes de acceso.
La cantidad de público que hubo en el estadio de River por el superclásico con Boca llamó la atención de todos. Pese a que estaba habilitado para el ingreso de la mitad de espectadores, el Monumental lució a pleno como si no existiera el aforo del 50 por ciento.
La capacidad permitida era de 36 mil hinchas pero claramente ingresaron muchos hinchas más. Los encargados de la seguridad insistieron en que el aforo permitido fue respetado, pero más reconocieron que el límite fijado no fue cumplido.
River ya presentó un informe ante la Ciudad en el que admitió que no funcionaron los controles en los molinetes de acceso al estadio por lo que se sobrepasó la capacidad, según publicó el sitio tn.com.ar.
Por la falta, el Ministerio Público Fiscal (MPF) porteño le labró un acta al club de Nuñez y anticipó que abrirá una investigación para determinar responsabilidades en lo sucedido.
Además, desde el organismo informaron que hubo detenidos por venta de entradas falsificadas y que se labraron actas a trapitos.