El Director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial fue empleado hasta diciembre de 2019 de la empresa de fotomultas Cecaitra. Y, ahora, desde cargo le firma todos los convenios a su verdadero jefe. “La ANSV está gerenciada por un privado”, se quejó un intendente

Martín El Tahham registra aportes como empleado de la Cámara de Empresas de Control y Administración de Infracciones de Tránsito de la República Argentina (Cecaitra) hasta diciembre de 2019. Luego, asumió como Director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV). Y desde allí le firma convenios millonarios a su (ex) empleador. Aquí mismo se podría terminar esta nota; y la continuidad de este hombre en el cargo. Pero…

La ANSV depende del Ministerio de Transporte de la Nación. El organismo que debería controlar y regular toda la seguridad en rutas y autopistas del país. Pero El Tahham está para otras cosas sentado en ese lugar. Su función es favorecer a su verdadero jefe, Bernardino García, titular de Cecaitra, y así inundar de radares con fotomultas las más rentables autopistas que abrazan a la Ciudad de Buenos Aires.

La jugada fue magistral, a través de este hombre, Cecaitra se asegura no licitar, ni participar de ningún tipo de mecanismo para quedarse con las cámaras de gran parte de estas autopistas. Es el típico caso de atender a ambos lados del mostrador; la “Gran Aranguren” con Shell durante el Gobierno de Macri. Claramente, esta conducta está tipificada y condenada por la Ley de Ética Pública, 25.188.

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El Tahham no está solo en esta faena, que se cuece en la opacidad del poder y ante un asombroso silencio. Su jefe administrativo, y fiel ladero, es Pablo Martínez Carignano, quien también ocupó el cargo análogo en la Ciudad de Buenos Aires hasta 2012. Allí, ya habría estrechado y cerrado todos sus vínculos con Cecaitra. Hoy son más fuertes que nunca.

Entre los dos, con el pedido y la aprobación de Bernardino García, arman y desarman en la Agencia Nacional de Seguridad Vial, a espalda de todos los funcionarios de carrera, y políticos. “Hoy la ANSV está gerenciada por Cecaitra. El Estado se corrió para que la maneje un privado con estas dos personas”, graficó un intendente, que sufrió las presiones del Ente.

Martínez Carignano y El Tahham, ambos denunciados ante el Ministerio de Transporte, urdieron una estrategia con un emisario inorgánico que recorre municipios para que éstos contraten a Cecaitra, y pongan sus cámaras para sacar fotomultas. Es obvio: son parte del negocio.

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Martín El Tahham

Hay intendentes que denunciaron, ante la misma línea política, que los fue a ver “Sebastián Álvarez, en nombre de Carignano y El Tahham para que contrataran a Cecaitra” a cambio de un pronto trámite administrativo. También es obvio: es ilegal.

Uno de los botones de muestra se adjunta en este artículo. En plena pandemia y cuarentena estricta, el 11 de mayo de 2020, la ANSV y Cecaitra firmaron un convenio de cooperación. Adivinaron: tiene la firma de Carignano y García.

El edificio de Cecaitra de Boulogne fue allanado la semana pasada, en el marco de la causa que sigue Sergio Dileo, titular de la UFI 6 de Morón, por la contratación directa con la ex administración macrista de ese distrito, para la colocación de cámaras. El fiscal está evaluando abundante documentación, a la espera de la declaración de un testigo clave. La cúpula de esta cámara está compuesta por los García padre e hijo, y el condenado por delitos administrativos: Américo Di Blasio.

En el Ministerio de Transporte se cuenta que las horas de Carignano y El Tahham están contadas, porque no quieren que el conflicto escale judicialmente, y toque al presidente de la Nación.