Las normas fueron enviadas a la Legislatura por el Ejecutivo porteño y los diputados oficialistas lograron aprobar las leyes en la segunda lectura. En las inmediaciones del Palacio Legislativo se realizaron marchas en rechazo a los proyectos.
Pese al rechazo del bloque opositor encabezado por el Frente de Todos (FdT) y de asociaciones vecinalistas y ambientalistas que se reunieron frente al Palacio Legislativo, el bloque oficialista Vamos Juntos logró imponer su mayoría en el reciento de la Legislatura y aprobó los cuatro proyectos de ley que se impulsaban desde el Gobierno porteño y que contemplaban los convenios urbanísticos firmados entre el Ejecutivo comunal y diferentes desarrolladoras privadas.
Vamos Juntos, el bloque oficialista en la Legislatura porteña, logró este jueves aprobar dos proyectos del jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta: la rezonificación de Costa Salguero, para habilitar allí la construcción de edificios privados, y el convenio con el grupo IRSA para levantar un nuevo barrio en la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors en Costanera Sur.
Con 36 votos a favor, del oficialismo y aliados; 22 en contra, del Frente de Todos y del Frente de Izquierda, quedó aprobada la rezonificación de Costa Salguero; en tanto que el convenio con IRSA recibió 36 votos a favor, 20 en contra y 2 abstenciones.
También se aprobó el convenio que contempla la construcción de nueve torres en diferentes barrios porteños y la ley que crea un “régimen especial de regularización de obras y construcciones llevadas a cabo en contravención al Código Urbanístico y al Código de Edificación”.
Apenas se inició el debate de las cuatro normas, se trata de la segunda lectura de las leyes aprobadas en septiembre pasado, y luego de la realización de la audiencia pública, el bloque opositor mayoritario expresó su rechazo, lo mismo que los integrantes del Frente de Izquierda de los Trabajadores – Unidad.
Cuando hizo uso de la palabra la diputada del Frente de Todos María Rosa Muiños, alertó que el nuevo régimen “no tiene en cuenta el impacto ambiental” de las obras que pretende legalizar y agregó que el Gobierno de la Ciudad no tiene un diagnóstico sobre la cantidad de construcciones que serán alcanzadas, qué dimensiones tienen, ni cuántas de ellas “están judicializadas”. “El mercado está definiendo la ciudad, multiplicando la capacidad constructiva“, aseguró, por su parte, Javier Andrade, legislador porteño del Frente de Todos, durante su discurso en la sesión.
De todas maneras, las posturas de los legisladores de la oposición no alcanzaron para sumar más votos en el reciento y torcer la votación.
Apenas se conoció el resultado de la votación, News Digitales se contactó con el secretario de Desarrollo Urbano porteño, Álvaro García Resta, quien señaló: “Recuperar casi 70 hectáreas de tierra que hoy están en manos privadas para la gente es histórico. Nunca se había incorporado tanto espacio verde y público de una sola vez”. “Las transformaciones urbanas requieren discusiones profundas como las que se dan con todos estos proyectos. El metrobús, las ciclovías, el Paseo del Bajo o plaza Houssay ya son ejemplos de que nuestra visión de la Ciudad es la de una metrópoli moderna y dinámica opuesta a una idea antigua donde nada cambia nunca”, completó el funcionario.
Protesta de organizaciones vecinalistas
Integrantes de asambleas vecinales y organizaciones sociales protestaron este jueves en las inmediaciones de la Legislatura porteña para rechazar la idea del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires de habilitar la construcción de edificios en la costa del Río de la Plata y advirtieron que ese proyecto, aprobado hoy en el Parlamento local, “solo favorecerá la especulación inmobiliaria”.
Los manifestantes se congregaron a la mañana en las puertas de la sede legislativa, ubicada en Perú 160 del centro porteño, donde se realizó la sesión ordinaria en la que Vamos Juntos, el bloque oficialista en la Legislatura, logró aprobar dos proyectos enviados desde el Gobierno porteño: la rezonificación de Costa Salguero, para habilitar allí la construcción de edificios privados, y el convenio con el grupo IRSA para levantar un nuevo barrio en la exCiudad Deportiva de Boca.
“La Costanera está en peligro, nada de lo que se votará es favorable para las problemáticas que enfrentamos como conjunto ciudadano, sólo se favorecerá la especulación inmobiliaria”, habían advertido en el inicio de la protesta desde El Movimiento, que agrupa a los colectivos vecinales.
En ese marco, el abogado ambientalista Jonatan Baldiviezo afirmó que “este combo de emprendimientos inmobiliarios va en contra de lo que manifestó la ciudadanía en las audiencias públicas” y señaló que “se convertirá en la sesión más escandalosa de los últimos 30 años”.
Entre las organizaciones que participaron de la protesta estuvieron el Observatorio del Derecho a la Ciudad, Basta de Demoler, el colectivo de Arquitectas en defensa de las tierras públicas y grupos de vecinos de los barrios de Núñez, Parque Chacabuco, Colegiales, Villa Ortúzar, Bajo Belgrano y San Telmo.
También la Cátedra de Ingeniería Comunitaria de la Universidad de Buenos Aires, el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas de Unidad Popular, el Frente Territorial Salvador Herrera y La Defensoría de Laburantes, entre otros.