
Boris Johnson, primer ministro del Reino Unido, volvió a hacer de las suyas y con su característica chicanera le mandó un mensaje a la Argentina, en el marco de un saludo de Navidad y Año Nuevo que les envió ayer a los habitantes de las Islas Malvinas.
Johnson recordó que la guerra entre nuestra nación y el Reino Unido por la soberanía de las Malvinas cumplirá 40 años en 2022 y ratificó su posición sobre el archipiélago austral. Señaló que a lo largo de estas cuatro décadas pasaron “muchas cosas cambiaron en el mundo”, pero enfatizó en que “hay una que permanece absolutamente inalterada: el compromiso del Reino Unido con las Falklands y su pueblo”.
El saludo fue publicado en la edición de 2021 del medio Penguin News, y en un momento el primer ministro dijo: “El 2021 fue el año en el que incluso la Federación Internacional de Tenis de Mesa (ping-pong) reconoció, ante las ruidosas protestas de algunos sectores, la soberanía inviolable de los jugadores de tenis de mesa de las Malvinas y los wiff waffers (por el ping pong)”.
Sin mencionar a la Argentina, el mensaje está dirigido a nuestro país de manera directa y hace referencia a las críticas que hicieron la Cancillería Argentina y la Federación Argentina de Tenis de Mesa (FATM) ante la federación internacional de ese deporte para evitar que se sumara a las Islas Malvinas como miembro independiente. La frase “ruidosas protestas” hace clara referencia a eso.
En su momento, Fernando Joffre, presidente de la FATM, había dicho que “no puede haber dos federaciones que representen a nuestro país”, pero el reclamo argentino, presentado en noviembre, no fue tenido en cuenta y los isleños fueron reconocidos como miembros plenos.
Para finalizar, Johnson esgrimió que las Islas Malvinas son parte de la “gran familia británica” y le dijo a la sociedad: “Mientras usted y sus compañeros isleños deseen permanecer bajo el paraguas de los Territorios Británicos de Ultramar, ahí es exactamente donde se quedarán”.