El Instituto de Tecnología Agropecuaria (INTA) informó que ascienden a 335 mil hectáreas las áreas quemadas en incendios rurales en la provincia de Corrientes en enero pasado.

El informe realizado por el área de Recursos Naturales de la Estación Experimental Agropecuaria Corrientes del INTA cuantificó los focos ígneos que se generaron en distintos puntos del territorio provincial desde el 1 al 28 de enero de 2022 e informó que la superficie total quemada alcanza las 335.043 hectáreas.

El ingeniero agrónomo Bernardo Kurtz explicó que la cuestión climática es un factor clave en la situación y, en declaraciones a la Agencia Télam indicó que “la provincia lleva dos años con muy escasas precipitaciones”, a lo que se suman “altas temperaturas”.

No recuerdo este nivel de falta de agua, en 30 años no he visto nada igual”, expresó y agregó que “sumado a la histórica bajante del río Paraná, se genera una situación muy crítica”.

Con respecto al estudio del INTA Corrientes, señaló que no se puede discriminar “si el origen de los incendios fue ocasional o intencional” e insistió con que las cuestiones climáticas propiciaron las condiciones para la proliferación de incendios, independientemente de su causa.

“Cualquier vidrio puede funcionar como lupa y provocar el fuego o también algún vehículo”, ejemplificó en declaraciones a Télam respecto de los riesgos que genera la sequía extraordinaria.

Consideró además que la situación continúa siendo “difícil” y que los bosques nativos y áreas de cultivo “son las que más tiempo llevan para su recuperación”.

La clasificación de áreas quemadas en la provincia de Corrientes, según coberturas vegetales afectadas, determina que 193.459 hectáreas corresponden a pastizales y malezales; 77.177 a esteros y bañados y 16.277 hectáreas a bosques nativos.

A modo de conclusión, el relevamiento de la Estación Experimental del INTA Corrientes, precisa que “la evidencia satelital indica que aproximadamente el 3,8 por ciento de la superficie de la provincia de Corrientes sufrió quemas durante enero de 2022”.

Del total, el 58 por ciento de las coberturas afectadas por las quemas son áreas de humedales como esteros, bañados, malezales y vegetación de valles aluviales, el 35 por ciento pastizales y el resto 7,4 por ciento son bosques, tanto cultivados como nativos”, concluyó la clasificación realizada sobre el alcance de los incendios en la provincia.