El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, volvió a apelar hoy a la “responsabilidad social” y al compromiso de los gobiernos provinciales y municipales en el “control” del cumplimiento efectivo de las restricciones vigentes para frenar el crecimiento de casos de coronavirus.

“A partir de la segunda ola se tomaron medidas que no fueron acompañadas, y mucho menos fiscalizadas por las jurisdicciones, e incluso algunas fueron judicializadas y aquí están las consecuencias”, advirtió Cafiero en diálogo con Radio Continental esta mañana.

El jefe de ministros explicó que el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) vigente desde el sábado último establece “un tramo de nueve días con mayores restricciones” para luego “volver” a la etapa establecida el 1 de mayo pasado, que, entre otras cuestiones, permitía la circulación hasta las 20.

Durante  la entrevista, Cafiero hizo eje en la necesidad de que los gobiernos locales garanticen el cumplimiento de las nuevas disposiciones y señaló: “Cuando las provincias adoptan las medidas, de alguna manera son más controlables”.

En este marco, el funcionario atribuyó, en parte, el aumento de casos de Covid-19 a la falta de “acompañamiento” de ciertos distritos a la estrategia sanitaria fijada por el Gobierno nacional.

“A partir de la segunda ola, se tomaron medidas que no fueron acompañadas y mucho menos fiscalizadas por las jurisdicciones e incluso algunas fueron judicializadas y aquí están las consecuencias”, sostuvo el jefe de Gabinete en referencia a lo que sucedió en la Ciudad de Buenos Aires, que desoyó e incluso cuestionó judicialmente la suspensión de las clases presenciales, una medida decidida para mitigar la expansión de casos.

En los últimos días, hospitales públicos y privados de 11 provincias y de la Ciudad de Buenos Aires confirmaron que tienen una ocupación superior al 90% de las camas de las Unidades de Terapia Intensiva (UTI), de acuerdo con los resultados de un relevamiento realizado el 21 de mayo último por la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI).

Según el informe, los centros de salud de Chubut, La Pampa, Mendoza y San Juan mostraron una ocupación superior al 95%, mientras que en la Ciudad de Buenos Aires y en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Corrientes, La Rioja, Santiago del Estero y Tucumán fue superior del 90%. En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) fueron relevadas 51 Utis, es decir, 1.227 camas, con ocupación del 93% en promedio.

Con todo, el Gobierno tiene en análisis estrategias esbozadas desde los ministerios de Salud y de Ciencia y Tecnología que plantean restricciones intermitentes mientras se acelera la aplicación de vacunas a la población.

Sin embargo, Cafiero fue categórico al remarcar que, por ahora, “hay un tramo de nueve días con mayores restricciones” y luego se regresa a la “caracterización” establecida entre el 1 y el 21 de mayo último.

La posibilidad de intercalar períodos de limitaciones más y menos rigurosas durante la gestión de la pandemia en los próximos meses es “una de las estrategias que se planteó desde el sistema de Ciencia”, confirmó hoy el ministro del área, Roberto Salvarezza, en declaraciones a radio Nacional.

Ayer, antes de partir hacia México y Cuba, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, afirmó que el aislamiento estricto de nueve días es una “medida transitoria” cuyos resultados se evaluarán cuando concluya ese período y no descartó que, “en caso de ser necesario”, se tomarán “medidas intermitentes” para contener la segunda ola de Covid-19.

“Los casos empezaron a aumentar en el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) y en muchas provincias de una manera preocupante; los días de invierno son de más riesgo y necesitamos ir monitoreando y, en caso de ser necesario, generar medidas intermitentes”, argumentó Vizzotti.

Luego Cafiero cuestionó la actitud de Juntos por el Cambio frente a la pandemia e ironizó: Querían certezas, ser parte de la toma de decisiones” pero, cuando fue enviado el proyecto de ley que establece parámetros sanitarios para la toma de decisiones respecto del coronavirus, “no lo quisieron debatir”.

Con esto se refirió a la iniciativa del Ejecutivo que fija criterios objetivos y comunes a aplicar a la hora de cambiar de fase o situación epidemiológica en cada distrito.

“No están pensando en salvar vidas -continuó Cafiero- sino en la próxima elección. Nosotros podemos rendir cuentas; ellos no; hablan desde el desconocimiento y el odio”, sostuvo el funcionario nacional.