Patricio Mai sobre el post boom del programa más visto del año
Patricio Mai fue uno de los participantes más queridos del Team Soledad en “La Voz Argentina”. Llegó a cuartos de final, y en las redes sociales se coronó como uno de los concursantes más respetados de Twitter, el enemigo público de los realitys. En este caso el joven dialogó con News Digitales sobre los conciertos en el Movistar Arena, su alta exposición en el ciclo de Telefé, y lo que vendrá en su carrera artística.
News Digitales: – Los artistas que salen de un reality suelen decir que la verdadera demostración de cariño y apoyo viene una vez terminado el show. ¿Lo sentís así? ¿Cómo estás viviendo el post La Voz Argentina?
Patricio Mai: – Estoy bastante de acuerdo. Si bien por redes sociales la gente empieza a seguirte y mandarte mensajes cuando salís en el programa, sentí mucho más la demostración cuando quedé afuera. Me empezó a seguir muchísima más gente de la que pensaba. Fue más grande la demostración de cariño después que durante. Estoy agradecido a todos para los que nos están apoyando a los shows en vivo que podamos tener de acá en adelante. El post La Voz es muy lindo. Yo siempre estuve dando clases, pero ahora la verdad es que se me llenó un poco más la agenda, era algo que no me imaginaba después del año pandémico que tuvimos.
ND: – ¿Cómo fue la experiencia del concierto en el Movistar Arena?
PM: – Creo que fue uno de los mejores cierres que podíamos tener como programa y como compañeros. Fue muy emocionante porque pasamos de las galas en Telefé sin público por la pandemia, a un primer contacto con el público. La gente apoyaba, estaba ahí aplaudiendo y alentando. Era una primera vez, pero también un final de ciclo. Cuando terminamos los dos shows hubo mucho abrazo y mucho llanto, pero fue algo hermoso. Una noche inolvidable.
ND: – ¿Qué te dejó La Voz Argentina como experiencia personal más allá de lo artístico?
PM: – Me dejó relaciones humanas muy lindas. La Voz es una gran escuela acelerada profesional de lo que significa subirse a un escenario y enfrentarse a un jurado internacional. Las relaciones personales que forjamos fueron mucho más importantes que haber estado en la tele. Teníamos profesionales que nos brindaban su sabiduría para que pudiéramos dar lo mejor. Desde la gente de seguridad, hasta producción, coachs, iluminadores, cámaras, sonido; todos con una sonrisa y tratándote bien. Fue un grupo increíble el que armamos con la gente de Telefé.
ND: – Vas a acompañar a Fran Maceroni en su primer show solista. ¿Soñas con preparar el tuyo?
PM: – ¡Sí! Me pone muy feliz. Franquito es un pibe de oro, se merece todo. Tiene mucho futuro y talento, es muy generoso y humilde. Además cuenta con una familia increíblemente buena que lo banca, y me pone muy contento por él. También me honra que me haya elegido para acompañarlo, espero que sea un hermoso show. Y estoy soñando con algo mío propio solista que tengo ganas, organizándome, ojalá pronto pueda decir que tenga novedades e invitados, es mi sueño próximo.
ND: – ¿Vas a seguir dando clases de canto en La Plata?
PM: – Sí, volví a dar clases, es otra de mis pasiones poder aplicar todo lo que fui aprendiendo en este camino y enseñarlo a gente que ame cantar y tenga la misma pasión que yo. Ahora estoy dando clases en mi casa, pero por el momento tengo casi todo el cupo lleno, pero la idea es tratar de conseguir un lugar en el centro de La Plata un poco más grande para tener más gente.
ND: – En su momento entrevisté a Gustavo Corvalán, primer ganador de La Voz, y me dijo que La Sole lo seguía llamando para cantar juntos. ¿Hay algo pensado para hacer con ella o es muy pronto todavía?
PM: – Te puedo decir lo mismo. La Sole fue muy generosa y humilde con nosotros. Nos dijo a cada uno que quería ser parte de nuestros shows, como también nosotros en los de ella. Nos brindó todo lo que tenía a su alcance, estoy muy feliz de haberla conocido, y sorprendido por su don de gente. Seguramente vamos a estar cantando con ella el 8, 9 o 10 en el Movistar Arena, y estamos con los preparativos para acompañarla. Me saco el sombrero con ella, es todo lo que está bien.
