La menor estaba en el probador junto a su madre cuando un hombre comenzó a atacar a los presentes con una cadena y la Policía abrió fuego
Una adolescente chilena que estaba probándose un vestido para su fiesta de 15 fue asesinada de al menos un balazo por la Policía de Los Ángeles, que quisieron detener el avance de un hombre que estaba atacando a varias personas dentro de un local.
Si bien el suceso tuvo lugar el 23 de diciembre, recién se dio a conocer en las últimas horas, junto al video en el que se ve lo ocurrido.
Valentina Orellana Peralta, de 14 años, estaba comprando ropa junto a su madre para su fiesta de 15 cuando un hombre comenzó a atacar a varios clientes con una cadena de bicicleta. Entonces irrumpieron los agentes de la fuerza de la ciudad californiana y dispararon por lo menos tres veces. Uno de esos proyectiles, por accidente, terminó impactando en el cuerpo de la menor, quitándole la vida en cuestión de minutos.
La chica, que nació en Santiago de Chile, había llegado a Estados Unidos seis meses atrás con su madre para vivir con su hermana mayor, que ya residía en la metrópolis de la costa oeste, de acuerdo a lo reportado por Los Ángeles Times.
Si tía Soledad Peralta la describió como “una chica tímida” que le gustaba el reggaetón y que “se estaba poniendo al día con el inglés y se volvía más extrovertida”. “Estaba feliz de estar con su hermana mayor“, indicó, para después relatar que “Valentina murió en los brazos de su mamá, dentro del cambiador. Mi hermana no comprende cómo pudo haber sucedido esta tragedia justo cuando habían logrado reunir a la familia”.
El lamentable y sangriento episodio tuvo lugar en una tienda cercana a Los Ángeles, en North Hollywood, y los policías respondieron a un llamado sobre “un ataque a mano armada”. A través de las cámaras de seguridad puede verse a un hombre alterado que se paseaba por la tienda con una cadena de bicicleta en la mano. El sujeto, identificado como Daniel Elena López (24), comenzó atacar a varios clientes y ahorcó y golpeó repetidamente a una mujer en la cabeza y en el cuerpo, con la cadena.
Los uniformados que intervinieron subieron por una escalera mecánica y vieron a esta señora, por lo que uno de los oficiales gritó: “está sangrando, está sangrando”, y poco después dieron con el sospechoso. Casi de inmediato uno de los policías disparó, el sujeto cayó y fue esposado.
Luego, siempre gracias a las imágenes de las cámaras de seguridad, pudo verse que uno de los disparos que hizo el agente impactó en la pared exterior del vestuario donde Valentina estaba escondida con su madre.
El jefe del Departamento de Policía, Michael Moore, dijo que ordenó una investigación del hecho. “Este incidente caótico que resultó en la muerte de una niña inocente es trágico y devastador para todos”, dijo. Relató a su vez que presentó sus condolencias a la familia de Orellana Peralta y afirmó que trabajarán para aclarar “las circunstancias bajo las cuales ocurrió esta tragedia”.
“Es inaceptable que policías de Los Ángeles, entrenados, abran fuego en una tienda llena en plena época de Navidad sin estar seguros de que el sospechoso estaba armado”, dijo Domingo García, presidente de Lulac, una de las principales organizaciones de defensa de los derechos civiles de los hispanos en Estados Unidos.