La expulsión del volante frente a Boca parece haber colmado la paciencia de los dirigentes.

Pablo Pérez es un muy buen jugador de fútbol. Tiene criterio, muy buen trato de pelota y es un volante que llega al gol. El domingo pasado, frente a Boca en la Bombonera era, probablemente, el mejor jugador de Independiente. Hasta que a los 75´, un control de pelota se le fue largo en la puerta del área rival y lo fue a buscar con una tremenda plancha sobre Campuzano. El árbitro Fernando Echenique no tuvo más remedio que expulsarlo. Desde los 21´el Rojo jugaba con uno de más por la expulsión de Izquierdoz en el xeneize y no ganaba el partido debido a la descollante actuación de Marcos Díaz en el arco local. Con la actitud de Pérez quedaron diez contra diez, con la sensación de que se frenaba el impulso que hacía superior a Independiente.

¿Por qué esa reacción totalmente fuera de lugar, en un partido que su equipo dominaba y, con un hombre más, tenía grandes posibilidades de ganar? Minutos antes, un disparo suyo desde fuera del área se había ido muy cerca del poste izquierdo de Díaz. ¿Fue una reacción de impotencia frente a la gran actuación del arquero y a la imposibilidad de convertir? No se sabe. El partido terminó empatado en 0 y gran parte de la parcialidad roja responsabilizó a Pérez por su acción, a pesar de que había sido el mejor hasta ese minuto fatídico.

¿Final para Pablo Pérez en Independiente?
Pablo Pérez prepara la plancha frente a Campuzano que derivería en su expulsión ante Boca

No es la primera vez que sucede. Su anterior paso por Boca tuvo varias situaciones similares. Jugaba muy bien pero siempre era amonestado y estaba al borde de la expulsión, al margen de las veces que dejó a su equipo con diez en jugadas que parecían totalmente fuera de contexto. En Independiente solamente había sido expulsado una vez, el año pasado contra San Martín de San Juan al reaccionar a un puntapié. Su fama lo precede, aunque varias veces caminó por la cornisa. También tuvo su encontronazo con el técnico anterior, Sebastián Beccacece, por la cual fue sancionado internamente. Su carácter, tan elogiado en cuanto a la intensidad que pone en el campo, le juega muchas veces en contra.

¿Final para Pablo Pérez en Independiente?
La acción que provocó la expulsión desde otro ángulo.

Lo cierto es que los dirigentes se hicieron eco de la opinión de los hinchas y parece que se hartaron. El presidente de Independiente, Hugo Moyano, confirmó que se le está buscando una salida. Es que Pérez tiene contrato hasta junio y, aunque el pase pertenece a Boca, el Rojo tiene una obligación de compra por 650.000 dólares. Moyano se quiere liberar de un sueldo alto y a la vez de esa obligación. Y Pérez le dio un motivo excelente.

¿Final para Pablo Pérez en Independiente?
Tiempos no tan lejanos, en los que Moyano y Pablo Pérez eran todo ilusión con la camiseta del Rojo.

A pocas horas de cerrar el libro de pases, las soluciones parecen ser o rescindir el contrato de mutuo acuerdo, cosa poco probable porque el jugador quiere cobrar y el club no quiere pagar, o conseguir algún club. Su representante Jorge Bilicich está en Europa y, en declaraciones radiales de hoy, manifestó no tener ningúna oferta concreta de algún club ya que todos los posibles interesados chocan contra el límite del tope salarial que rige, por ejemplo en España. Newell´s, club donde se inició el volante, también estaba interesado, pero no podía satisfacer las pretenciones económicas del jugador. Alguien tendrá que ceder. De lo contrario hasta puede ser que Pérez quede “colgado” hasta la finalización de su contrato, porque los dirigentes de Independiente cantaron para él un “no va más…”