De acuerdo a los resultados preliminares de un estudio, una persona infectada con Ómicron tiene hasta 70% menos de probabilidades de terminar hospitalizada
Pese a ser más virulenta, la variante Ómicron es menos grave que la Delta, de acuerdo a lo divulgado hoy por científicos británicos y franceses y tras un estudio ensayado.
Autoridades sanitarias de las mencionadas naciones europeas coincidieron este jueves en que una persona positiva de la variante Ómicron tiene hasta 70% menos de probabilidad de requerir una hospitalización, pese a la cantidad de casos y a la fuerza con la que apareció.
Los datos preliminares recopilados por la agencia de Salud Pública británica sugieren que los pacientes afectados con esta nueva cepa tiene entre un 50% y un 70% menos chances de culminar en un hospital internación mediante, en relación a los que fueron afectados con la variante Delta.
Sin embargo, aclararon que esta nueva mutación es mucho más virulenta no solo que la Delta, sino también que las otras.
De los resultados del informe se desprende que la variante Ómicron produce una enfermedad más leve que las otras, aunque a su vez se propaga más rápido y tolera mejor las vacunas. Mientras tanto, se calcula que un individuo con Ómicron es entre 31% y 45% menos propenso a requerir atención del servicio de emergencias de un hospital en comparación con uno con la variante Delta.
Jean-François Delfraissy, presidente del consejo científico que asesora al gobierno de Francia, aseveró que la transmisión de Ómicron “es mucho más elevada, pero es probablemente menos grave”, aunque dijo que se desconoce “hasta qué punto”.
Arnaud Fontanet, miembro del consejo de asesoramiento francés, añadió que “es muy importante estudiar lo que va a pasar en Londres la semana que viene porque nos enseñará mucho sobre la gravedad de la enfermedad que provoca Ómicron”.
Hay que tener en cuenta que hoy hubo en Gran Bretaña nada menos que 119.789 casos de Covid-19, un récord en pleno aumento de los contagios por la variante Ómicron y un aumento del 50% en los últimos siete días. Ayer los casos habían superado -por primera vez desde el inicio de la pandemia- la barrera de los 100.000 diarios.
En Francia se registraron hoy 91.068, “las peores cifras desde el inicio de la pandemia”, dijo el ministro galo de Sanidad, Olivier Véran.
