En los octavos de final le ganaba a Paraguay 2 a 0, pero los Guaraníes lo dieron vuelta a cinco minutos del final.

Parece una maldición que pesa sobre la Argentina. Nuestro fútbol tiene logros de todo tipo a nivel mundial. Desde Copas del Mundo de mayores y Sub-20 hasta Juegos Olímpicos y Copas Américas. Pero la menor de las categorías, la Sub-17, nunca pudo consagrarse. Lo más lejos que había llegado eran los terceros puestos en los cértámenes de Italia 1991, Ecuador 1995 y Finlandia 2003. Había grandes esperanzas en que la maldición se cortara este año en Brasil, porque el equipo dirigido por Pablo Aimar viene trabajando desde hace dos años, consagrándose campeones en los sudamericanos Sub-15 y Sub-17 con muy buenos jugadores.

El rendimiento y los resultados en la fase de gupos fueron buenos: empate sin goles con España y dos victorias 3 a 1 frente a Camerún y Tayikistán le permitieron pasar a octavos de final en segundo lugar por tener peor diferencia de gol que España. Paraguay se presentaba como un duro rival, pero el primer tiempo de los chicos fue óptimo. A los 27´, un centro pasado desde la derecha del defensor de River Luciano Vera fue conectado de cabeza en el segundo palo por Exequiel Zeballos de Boca poniendo el 1 a 0. Y a los 42´, el goleador de Atlético de Rafaela Matías Godoy definió con todo el arco de frente una pelota bajada de cabeza por el capitán Francisco Flores de San Lorenzo. Nada podía salir mejor. Argentina se iba al entretiempo con dos goles de ventaja y jugando bien.

El Sub-17 de Argentina, y una eliminación que duele.
Zeballos festeja el primer gol argentino, en momento en que todo era alegría para el equipo de Aimar.

En el inicio del complemento nada cambió, hasta que en una desafortunada acción entre Cano (Vélez) y su arquero Ríos Novo (Lanús), el defensor se lleva por delante la pelota que ingresó en su propio arco a pesar de que llegó a rechazar y hubo que acudir al VAR para confirmar que había entrado. Paraguay sintió que estaba con vida y tomó ánimo, mientras Argentina entró en confusión. Ya el gol del empate convertido a los 73´por Torres era hazaña. Pero los guaraníes tenían más todavía, porque a falta de cuatro minutos Duarte entró con un slalom en velocidad por el callejón del 10 y definió fuerte y alto dejando sin chances a Ríos Novo y dándole la victoria a Paraguay por 3 a 2. En media hora fatal, Argentina pasó de ganar por dos a perder por uno.

El Sub-17 de Argentina, y una eliminación que duele.
Paraguay celebraa el pase a Cuartos. La tristeza es toda de Argentina

El final pudo ser con escándalo porque algunos jugadores paraguayos festejaron con alguna burla y algunos argentinos (las cámaras mostraron al capitán Flores como uno de los más exaltados) reaccionaron. Pero la rápida intervención de Pablo Aimar y el cuerpo técnico argentino hizo salir a los jugadores de ahí y la cosa no pasó a mayores.

El Sub-17 de Argentina, y una eliminación que duele.
Final con algún tumulto que el cuerpo técnico argentino logró controlar

Ya será momento de sacar conclusiones. Lo cierto es que la Sub-17 es una categoría que se le niega a nivel mundial a los seleccionados argentinos como una maldición. Y este buen equipo de Aimar tampoco pudo con ella. Son todavía chicos y tienen mucho para crecer y aprender.