La Policía señaló que el estallido de un taxi frente a un nosocomio de mujeres fue provocado por una bomba casera 

Luego de que confirmaran que una explosión ocurrida en un taxi frente a un hospital de Liverpool fue causada por una bomba de fabricación casera, el Reino Unido elevó hoy a “grave” su nivel de “amenaza terrorista“, el segundo más alto.

Fue la Policía quien indicó que se trató de una explosión provocada, y también aseveró que el incidente que tuvo lugar ayer y causó la muerte del presunto fabricante de la bomba, además de heridas al taxista, fue de naturaleza “terrorista“, aunque agregó que se investigan las motivaciones.

La ministra de Interior, Priti Patel, declaró ante la televisión que “elevamos el nivel de amenaza de importante a grave”, y señaló que los hechos en la portuaria ciudad de Inglaterra eran el segundo acto considerado extremista después del asesinato del diputado David Amess hace un mes. Este nivel de amenaza significa que el riesgo de un atentado se considera “altamente probable”, explicó.

Amess fue apuñalado el 15 de octubre durante una reunión con votantes de su distrito, y la policía dijo que fue un acto de “terrorismo” cometido por un simpatizante del grupo fundamentalista Estado Islámico (EI). Su muerte llegó cinco años después de que la legisladora del Partido Laborista, Jo Cox, fuera asesinada a tiros y cuchilladas por un extremista de derecha.

Reino Unido eleva a nivel de “amenaza terrorista” tras la explosión de un taxi frente a un hospital
Escenas después de que un taxi volara por los aires frente a un hospital de Liverpool

A su vez, se identificó al hombre muerto en el estallido del taxi como Emad al Swealmeen, de 32 años, y las autoridades dijeron que vivió en dos casas de la citada ciudad “por algún tiempo”, aunque no dieron más detalles.

Sin citar fuentes, la cadena de noticias Sky News informó que al parecer el sujeto era un solicitante de asilo de un país de Medio Oriente que vivía en Reino Unido desde hace un tiempo y padecía problemas mentales, mientras que el primer ministro Boris Johnson relató que el pueblo del Reino Unido “nunca se dejará intimidar por el terrorismo. Nunca cederemos ante los que quieren dividirnos con actos insensatos”.

Horas antes de estas declaraciones, la policía ya había calificado hoy de “incidente terrorista” la deflagración del taxi, ocurrida frente a un hospital para mujeres en Liverpool, en el norte de Inglaterra.

Aparentemente vinculados al hecho, se arrestó ayer a tres hombres de 29, 26 y 21 años, y hoy cayó uno más, de 20, en “virtud de la ley de terrorismo”. De acuerdo a los voceros, todos son “cómplices” del que murió en el taxi.

Aún no se conocen las razones de este “acto terrorista”, dijo Russ Jackson, responsable de la policía antiterrorista en el noroeste de Inglaterra.

Los investigadores creen que el artefacto explosivo fue “fabricado” por el pasajero, que lo llevó al interior del vehículo y murió en la explosión. Se supo que el individuo tomó el coche de alquiler en la avenida Rutland y pidió ir al nosocomio de mujeres, situado a 10 minutos en coche.

Reino Unido eleva a nivel de “amenaza terrorista” tras la explosión de un taxi frente a un hospital
El momento posterior a la explosión del taxi

La explosión ocurrió justo antes de las 11 de la mañana durante las conmemoraciones a las víctimas de la guerra, llamado “Día del Recuerdo” en el Reino Unido. A pocos metros, soldados, veteranos y miembros del público estaban reunidos para un homenaje en la catedral de Liverpool, y hasta el momento la policía desconoce si la explosión estaba también dirigida a las conmemoraciones.

Según medios locales que citan a investigadores y amigos del taxista, otra versión es que el pasajero quiso ir primero a la catedral de Liverpool, pero como algunas calles estaban cerradas, el conductor tuvo que pasar frente al hospital.

Algunos diarios y responsables políticos llamaron “héroe” al taxista, que resultó herido en la explosión, pero permitió -según ellos- evitar muertos. Ya salió del centro médico donde estaba siendo tratado.

Para el diario Daily Mail, el conductor se dio cuenta de que el pasajero era “sospechoso” y lo encerró en el taxi antes de escaparse. En tanto, la alcaldesa de Liverpool, Joanne Anderson, expuso que el chofer “con sus esfuerzos heroicos logró evitar lo que pudo ser una catástrofe horrible en el hospital“.