El suizo jugó a gran nivel y despejó las dudas mostradas en sus dos primeras presentaciones.

No tuvo piedad el suizo Roger Federer en su match de tercera ronda del US Open, ya que demolió al británico Dan Evans (58° en el ranking) por 6/2 6/2 y 6/1 y con esta victoria se ubicó en los octavos del final del último Grand Slam del año. El helvético no mostró fisuras en su juego y no le dio chances a Evans, que había manifestado que tenía confianza en poder derrotar al actual número 3 del escalafón mundial. Un concierto del mejor tenis brindado por el de Basilea, que deleitó al público presente en el Arthur Ashe Stadium.

Federer no había mostrado su mejor versión en sus dos encuentros anteriores, ante el indio Sumit Nagal (190°) y el bosnio Damir Dzumhur (99°), donde había perdido el primer set en ambos partidos. Especialmente con Dzumhur se lo vio muy bajo tenísticamente y contrariado en su lectura corporal durante el primer parcial, aunque pudo revertir la imagen y avanzar de ronda.

El próximo rival del ex número 1 del mundo saldrá del duelo que sostendrán hoy el belga David Goffin (15° preclasificado) y el español Pablo Carreño Busta (69°).