El Gobierno porteño presentó el jueves un proyecto de ley en la Legislatura que apunta a modificar las condiciones laborales y de carrera de los docentes. cuáles son los ejes centrales de la polémica iniciativa.

Luego de que el proyecto de ley que propone “actualizar y jerarquizar la formación y los contenidos” de los trabajadores de la Educación,  bloques de la oposición porteña y sindicatos docentes anticiparon su rechazo a la inciativa que impulsa el Gobierno de la Ciudad, y que apunta a reformar el Estatuto Docente a partir de cambios en el esquema de ascensos y una premiación con mejoras salariales a los maestros que concurran a capacitaciones de manera continua.

Tras al anuncio de Horacio Rodríguez Larreta en la Legislatura porteña el pasado 1 de marzo, de mejorar las condiciones laborales de los docentes, la iniciativa ingresó el jueves al palacio Legislativo y comenzará a debatirse en comisión la semana próxima.

El expediente contiene 40 artículos que promueven unos 25 cambios al actual estatuto, el cual establece los procedimientos de ingreso, permanencia, movilidad y retiro de todos los docentes del sistema de educación de estatal.

La normativa vigente también define la manera en la cual maestros y profesores acceden a sus cargos, las lógicas de reconocimiento de su capacitación y experiencia y los incentivos propuestos para los ascensos y los salarios de la carrera docente.

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Estatuto. Los docentes rechazan modificaciones a sus condiciones laborales.

Desde el bloque del Frente de Todos, la principal fuerza opositora porteña, advirtieron que el proyecto “parte de la premisa de que el docente no se capacita y eso es erróneo“, en tanto que señalaron que “la iniciativa no fue discutida ni consensuada con los trabajadores de la educación”.

En este sentido, aseguraron que “los antecedentes del PRO en materia docente no son nada buenos”.

Por su parte, Angélica Graciano, secretaria de UTE-Ctera, remarcó que “si hay trabajadores que estudian y se forman son los docentes porque lo hacen desde el primer hasta el último día”.

El Estatuto del docente es un valor en sí mismo porque garantiza el ingreso al trabajo de forma igualitaria y además constituye una reivindicación que venimos sosteniendo desde hace muchos años”, agregó.

La legisladora del Frente de Izquierda- Partido Obrero y secretaria gremial del sindicato docente Ademys, Amanda Martín, sostuvo que “el Gobierno porteño pretende introducir una reforma del Estatuto Docente, que en realidad es una reforma laboral encubierta porque introduce el salario por mérito, cambia mecanismos para el ascenso docente ligados a contenidos que se desconocen, bajo una fórmula genérica de capacitación”.

“A su vez, utiliza el justo reclamo de la titularización docente colocándolo en el mismo proyecto de reforma como una ´zanahoria´ para meter esta reforma que no consideramos vaya a mejorar la enseñanza y el trabajo docente”, alertó.

En tanto, el presidente del bloque oficialista de Vamos Juntos, Diego García Vilas, dijo que “en la actualidad, en la carrera docente la única manera de crecer, en términos salariales, es saliendo del aula“.

“Lo que proponemos es una opción para el desarrollo de una carrera horizontal para los maestros”, remarcó y señaló que “el objetivo es tener docentes mejor formados y capacitados y que tengan un incentivo para hacerlo”.

Qué dice el proyecto

De acuerdo a la iniciativa, los ejes centrales están vinculados con el sistema de ascenso en los niveles inicial y primaria, el incentivo salarial a los docentes que concurran a una “capacitación continua“, un nuevo rol para el preceptor de la secundaria y una titularización “excepcional” de cargos interinos de escuelas de media, técnica, artística y CENS.

Según explicaron fuentes del Ejecutivo, tanto en el nivel inicial como en el primario, los docentes que quieren ascender “tienen que salir del aula y ser parte del equipo directivo de la escuela“, por eso se propone la creación de dos nuevos cargos que sean una opción para el trabajador sin desvincularse del rol de educador: el maestro especialista y el maestro coordinador.

“La idea es avanzar sobre la posibilidad de contar con roles y/o funciones que reconozcan la experiencia y el saber acumulado por los docentes que no desean pasar a desempeñar cargos de conducción y de supervisión, pero que están en condiciones de asumir otro tipo de responsabilidades que complementan y apoyan la tarea de la enseñanza”, precisaron.

Y agregaron que “se piensa en una trayectoria docente que, a través de la formación continua, permita el acceso a estas funciones diferenciadas con el objetivo de mejorar la práctica docente a través de diversos incentivos que incluya, formación específica, posibilidad de desempeñarse en funciones vinculadas al aula y reconocimiento salarial específico”.