Si bien estos dolores se conocen como dolores de crecimiento, no hay evidencia de que crecer duela. Los dolores de crecimiento pueden estar vinculados a un umbral bajo de tolerancia al dolor o en algunos casos a cuestiones psicológicas. No existe un tratamiento específico para los dolores de crecimiento. Puedes hacer que tu hijo se sienta más cómodo masajeando los músculos doloridos y colocando sobre ellos una almohadilla térmica tibia.
Síntomas
Causas
Diagnóstico
Tratamiento
No existe un tratamiento específico para los dolores de crecimiento. La buena noticia es que estos dolores no generan otros problemas ni afectan el crecimiento. Suelen mejorar naturalmente dentro de un período de uno o dos años. Y si no desaparecen completamente dentro de un lapso de aproximadamente un año, por lo general, se vuelven menos intensos. Mientras tanto, puedes ayudar a aliviar las molestias del niño con medidas de cuidado personal, como realizar masajes en las piernas del niño.
Metodos Caseros
Puedes ayudar a aliviar la molestia de tu hijo con los siguientes remedios caseros:
Cuándo consultar con el médico
La mayoría de los niños que tienen dolores de crecimiento no tendrán la necesidad de visitar al médico. Si el dolor es persistente o inusual, es posible que quieras consultar las inquietudes a tu médico o con el pediatra.