Las conversaciones de WatsApp donde negociaba con el clan Mameluco, el histórici capo narco de San Martín.

Un teléfono celular olvidado en el asiento trasero de una camioneta, utilizada por una banda narco para movilizar la droga, reveló una oscura trama de complicidad entre delincuentes y uniformados de la policía en la localidad de San Martín.

En las últimas horas, la jueza federal Vence detuvo a Cristián Marcos Aguirre, un oficial de la policía que cumplía funciones en una seccional de Malvinas Argentinas, pero que tenía vínculos “aceitados”, a través de de Whatsapp, con el clan poderoso narco liderado por Miguel Angel “Mameluco” Villalva, hoy preso en Ezeiza. Villalba está acusado de haber comercializado la cocaína adulterada en el asentamiento de Puerta 8 que provocó la muerte de 24 personas en febrero del año pasado.

Los chats de "El Tío", el narcopolicía que trabajaba para la banda de la cocaína adulterada

La Justicia Federal logró la apertura del teléfono celular secuestrado hallado en la camioneta y detectó numerosas conversaciones entre un miembro de la banda de “Mameluco” y el policía Cristián Aguirre. El contacto estaba agendado bajo el nombre de “Tío” o “Tío Nuevo”.

Según la investigación judicial, el agente policial “alertaba sobre procedimientos en la zona”, intentaba “eliminar la competencia” y también promovía “favorecer a las personas detenidas” en causas vinculadas al narcotráfico en los partidos de San Martín y Tres de Febrero. Los diálogos de Whatsapp pusieron al descubierto la relación entre narcos y policías.

Los chats de "El Tío", el narcopolicía que trabajaba para la banda de la cocaína adulterada

“Ojo que por costa anda la fede (Policía Federal) parando todo lo que camina. Una chata y un focus”, chateó el uniformado vía Whatsapp. Se sospecha que los mensajes iban destinados a Lucas Nahuel Baigorria, alias “Dylan”, hijo adoptivo de “Mameluco” Villalba y prófugo de la Justicia Federal.
“Tío! Porque no te fijas el patrullero que corta a la gente que sale de comprar”, le piden al uniformado el 18 de junio de 2022. Los narcos buscaban eliminar los controles policiales en los puntos de venta en la villa de San Martín.

El policía Cristián Aguirre cuando fue detenido se le secuestró once teléfonos celulares, 200 mil pesos en efectivo y sobres con elementos secuestrados en otras causas judiciales. La Justicia logró reconstruir una gran cantidad de diálogos. En una de las conversaciones el uniformado le chateó al narco de San Martín: “Amigo. Acordáte que hay un operativo en la fave”. “Si, si, amigo”, le responde el delincuente. Luego, de tres horas, Aguirre responde y le aclara: “Hasta el momento no van hacer nada. Está suspendido”.

En diciembre del año pasado, la jueza federal Vence solicitó a las autoridades del gobierno bonaerense “sanear la Policía bonaerense”. La magistrada remarcó, en aquél entonces a través de un fallo, que cada vez hay más narcopolicías que operan en la zona de San Martín.