Sergio Federovisky, viceministro de Ambiente, explicó que los incendios que se vienen produciendo estos últimos tres años en el país son llamados de sexta generación porque se dan “por la ausencia de humedad y altas temperaturas”.
Tras varios meses de incendios en Salta, y con focos activos que se vienen sucediendo a lo largo de todo el año en el Delta del Paraná y en otras provincias, el viceministro de Ambiente de la Nación, Sergio Federovisky, se refirió a la extensión de las temporadas de incendios en el país, a la responsabilidad de las personas al momento de prender fuego y a la causa directa de esta situación que vive Argentina desde hace tres años, el cambio climático.
En diálogo con NA, el viceministro sostuvo que “la sequía de los últimos tres años y el cambio climático global hacen que los incendios sean más extremos y que su magnitud se perciba aún más”.
“En Argentina el contexto local se da por la sequía extrema y de una prolongación inusitada, la falta de humedad debido a la falta de lluvias y temperaturas promedio altas que generan olas de calor y esto se repite en casi todo el país. Pero esto no solo pasa acá. Pasa en Canadá, España, Francia, en latitudes similares a las de Argentina en donde se están viviendo situaciones muy parecidas”, comentó.
Además, Federovisky sostuvo que una de las características de las temporadas de incendio es que empiezan a tener límites más difusos: “ahora es una sola temporada a la que se sumó la bajante del Paraná, lo que hace que la zona del Delta que no tenía temporada seca ahora la tenga y aparezca como una zona de propensa a los incendios”.
El viceministro explicó que los incendios que se vienen produciendo estos últimos tres años son llamados de sexta generación porque se dan “por la ausencia de humedad y altas temperaturas”, y que por lo tanto para la temporada de verano no se preparan de manera diferente a lo que vienen haciendo durante todo el año.
“Tenemos la aparición del fuego como resultado de la emergencia hídrica que estamos atravesando. A esto se suman las personas que inician el fuego para algo personal y es un coctel que nos lleva a situaciones verdaderamente muy difíciles”, comentó.
Al ser consultado sobre la intencionalidad de los incendios, sostuvo: “no es falta de conciencia sino de solidaridad de las personas que prenden fuego y que no desconocen la sequía porque son las mismas personas que van a pedir por la pérdida de sus cosechas por el tema de la sequía”.
Antes de concluir, Federovisky remarcó que “combatir el fuego no es acumular recursos, porque si así fuese Estados Unidos, que tiene la mejor tecnología, no tendría incendios, como así tampoco Australia los tendría y tuvo en 2020 incendios en los que se quemaron casi 20 millones de hectáreas. Es falaz solo pensar en los recursos y resulta equivocado. Nosotros colaboramos con las provincias a medida que solicitan la ayuda”.
En el reporte de este sábado, el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), que depende del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, informó que son cinco las provincias que mantienen focos activos: Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca y Entre Ríos.