La víctima prestaba servicio en el Comando Patrulla de San Isidro.
Otro policía de la Bonaerense fue asesinado en San Isidro y su muerte despertó una enorme conmoción en la fuerza. Matías Ezequiel Molina, quien prestaba servicio en el Comando Patrulla de San Isidro, perdió la vida cuando recorría la villa La Cava y fue atacado a tiros por un hombre.
El caso ocurrió este viernes 1 de diciembre a las 4 de la tarde en la esquina de las calles Hudson y Udaondo, a metros de un jardín de infantes. De acuerdo a las fuentes, la víctima realizaba una recorrida de rutina con una compañera de la fuerza cuando aparentemente intentaron identificar a seis personas.
Los voceros señalaron que los sospechosos salieron corriendo en distintas direcciones. El oficial bajó del móvil y comenzó a forcejear con uno ellos, hasta que un momento el sujeto le efectuó varios disparos de arma de fuego. Molina cayó al piso malherido.
Según las fuentes, el efectivo policial fue trasladado de urgencia al hospital de San Isidro, donde se le hicieron maniobras de reanimación, pero finalmente falleció como consecuencia de las heridas de bala que sufrió.
Durante la caravana de traslado, donde los móviles policiales abrían el paso, al dirigirse por la calle Rolón, antes de la rotonda de Márquez, uno de los conductores del patrullero perdió el control y realizó un trompo, para luego chocar contra un árbol.
Minutos después otra ambulancia trasladó al mismo hospital al policía, que sufrió varios golpes, pero se encontraba fuera de peligro.
En tanto, efectivos policiales acudieron de apoyo al lugar luego de ser alertados por el 911 y al realizar un relevamiento en la zona hallaron un DNI a nombre de Brandon Alfredo Zakowick (25), un joven conocido en el barrio y con antecedentes por robo.
De acuerdo a los testigos, la foto del documento coincidía con los rasgos físicos del joven que forcejeó con el policía, de quien además presuponían que habría resultado herido del enfrentamiento armado con la víctima.
En ese marco, los agentes iniciaron un rastrillaje en la zona y dieron con el sospechoso, que presentaba una herida de arma de fuego en un glúteo, y al que aprehendieron de inmediato, informaron fuentes policiales.
En tanto, en la escena del crimen los efectivos secuestraron el arma reglamentaria de Molina, con cuatro cartuchos en el cargador y uno en recámara, mientras que recogieron seis vainas servidas de calibre 9 milímetros.
Interviene en la causa la fiscal Cecilia Chaieb, que subroga el Área Criminal del Departamento Judicial de San Isidro e indagará al acusado de matar al policía en las próximas horas.