Es el gran desafío del DT Juan Antonio Pizzi

El conjunto azulgrana tuvo un flojo desempeño en los primeros seis meses del 2019, no es ninguna noticia a esta altura. Lo llamativo es que dentro del mediocre( para abajo) rendimiento exhibido, obtuvo buenos resultados en la Copa Libertadores de América. Porque en los torneos argentinos se mostró como un equipo liviano, sin sorpresa cuando manejaba la pelota. Para colmo, frágil en defensa. Pocos jugadores rindieron en buen nivel, como el caso del experimentado Fabricio Coloccini, que descolló varias veces . Equipo liviano porque le costaba mucho generar situaciones de gol en la mayoría de los partidos. Cambiar de ritmo en tres cuartos de cancha, era una ardua tarea para los dirigidos por Jorge Almirón. Los pobres rendimientos en la Superliga le costaron el puesto al entrenador, amén de haber logrado pasar la fase de grupos en el certamen continental. El fútbol no es una ciencia exacta, y así quedo plasmado con Almirón en su paso por San Lorenzo. Incluso no le fue bien desde que asumió, reemplazando al Pampa Biaggio en el último tramo del 2018.

Juan Antonio Pizzi aceptó el reto de dirigir nuevamente al Ciclón, y las expectativas son altas entre sus dirigentes e hinchas. El campeonato local obtenido en el 2013 está todavía fresco en la memoria de los simpatizantes cuervos. El DT tiene como principal anhelo cambiarle la cara al equipo, y lograr resultados a la vez. Tomó algunas decisiones drásticas, le bajó el pulgar a varios jugadores, entre ellos a Gonzalo Rodríguez, uno de los referentes. Otro que prepara las valijas para retornar al Atlético Nacional de Medellín, es Raúl Loaiza, de buen rendimiento en la primera parte del año, pero no es tenido en cuenta por el flamante cuerpo técnico. El próximo miércoles recibe a Cerro Porteño de Paraguay, por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. Vaya debut para el entrenador, difícil parada, pero se manifiesta confiado en su plantel. Un plantel que cuenta con muchas caras nuevas, y varias negociaciones para continuar reforzando el mismo. El técnico santafesino tiene en mente lograr un andamiaje que tenga una mayor sorpresa y cambio de ritmo en ofensiva. Abastecer a los delanteros es una premisa. En el rubro defensivo mejorar las coberturas y sincronizaciones, y no depender tanto de salvadas heroicas. Seguramente alentará a los dirigentes a no claudicar en la búsqueda de refuerzos de jerarquía.

San Lorenzo pateó el tablero en este receso, y en seis días tiene el primer gran examen de esta nueva era, y en su estadio. Pasar a cuartos de final de la máxima competencia sudamericana, es una gran motivación Debe olvidar las malas decisiones del pasado y volver….a ser San Lorenzo.