El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires Sergo Berni  reconoció que está distanciado de la vicepresidente luego de las últimas elecciones. Lejos de hacerse cargo del accionar policial en Miramar, por la muerte del joven baleado , solo se limito a criticarlo: “Hubo negligencia e impericia”.

El ministro de Seguridad de la provincia de Bueno Aires, Sergio Berni, reconoció que tras las elecciones se distanció de la vicepresidenta Cristina Kirchner por diferencias con “algunas cuestiones que la rodearon”.

Berni  desde hace meses se viene mostrando crítico de algunos aspectos del oficialismo, comenzó a apartarse del Frente de Todos luego de que le negaran la posibilidad de que candidatos de su espacio compitan con una lista propia en una interna de la coalición.

Justamente sobre este tema le preguntó este sábado el periodista Willy Kohan durante el programa La Noche de Mirtha Legrand, conducido por Juana Viale y que se emite por El Trece, del cual ambos participaron.

Ese es uno de los motivos por los cuales estoy tan distanciado, por sobre todas las cosas, del espacio político en el que milité 34 años de mi vida, que es el kirchnerismo”, respondió el funcionario bonaerense.

Al ser consultado por las razones que llevaron a esta situación, Berni sostuvo que “lo que pasó en estas últimas elecciones dejó discusiones con heridas todavía abiertas y muy profundas” y aseguró que él tiene “una visión más largoplacista, no tan concentrada”.

Yo estoy muy alejado de Cristina, pero hay cosas que es imposible que niegue: yo creo que, por lejos, es la persona con mayor visión política de la Argentina y de ahí para abajo hay un salto muy grande en materia de conducción”, agregó.

Sin embargo, aclaró que esta ruptura “no es por ella, sino por algunas cuestiones que la rodearon”. En este sentido, apuntó contra La Cámpora, a la que consideró “una organización con personas muy preparadas, pero también con otras que hacen mucho daño”.

Es sabido que Berni mantuvo una fuerte discusión con Máximo Kirchner, líder de esta agrupación, la noche de la derrota electoral, cuando le reprocho con dureza la falta de internas dentro del Frente de Todos en las PASO del 12 de septiembre.

Yo he sido muy crítico de lo que fue la campaña electoral del gobierno del cual formo parte. Me parece que un gobierno es exitoso cuando piensa en el futuro y no en una elección”, señaló.

Al respecto, opinó que el oficialismo “no tiene ejercicio” porque “el peronismo nunca gobernó en una coalición”, la cual, además, remarcó que “se debería hacer para proyectar una nación, fortalecerla y obtener objetivos, no para los comicios”. “Cuando usted se junta con alguien para ganar una elección y después ‘que Dios lo ayuda’, me parece que no es el camino”, advirtió.

Sobre su lugar en el Ministerio de Seguridad bonaerense, precisó que, si bien no se “sentía cómodo en el espacio político”, decidió no renunciar porque cree que el gobernador Axel Kicillof es “una de las pocas personas que tiene realmente un proyecto de provincia”. “¿Por qué me tengo que ir yo? Que se vayan los que dijeron que venían a ser mejores y en el camino perdieron 4 millones de votos por esa mirada especulativa, egoísta, egocéntrica, de pensar solamente en uno mismo y no en el desarrollo de la patria”, lanzó.

Por último, Berni garantizó que “no hubo una intervención” de Cristina Kirchner en el gabinete de Kicillof, sino que “después de las elecciones se dio justo la salida de la pandemia y una situación en la que la provincia necesitó comenzar a producir, a ponerse en marcha”, por lo que eran necesarios cambios en algunas carteras.

El Caso Luciano Olivera en Miramar

Sobre el caso del joven de 16 años Luciano Olivera baleado cruelmente por un policía bonaerense, el ministro de Seguridad bonaerense volvió a cuestionar el accionar de Maximiliano González, el policía acusado de asesinar a Luciano Olivera en Miramar, pero remarcó que “la respuesta de por qué” disparó contra el joven de 16 años “no la tiene nadie”.

Ante una acción, en el ser humano, las respuestas son individuales e impredecibles. Una cosa es entrenar en un polígono o un aula, pero después en situaciones de estrés donde no hay tiempo para pensar, el ser humano, ante un mismo estímulo, tiene reacciones impredecibles”, remarcó.

Asimismo, reconoció que se trató de “un caso de negligencia e impericia”, pero evitó referirse a lo sucedido como un hecho de gatillo fácil: “No esa tipificación en el Código Penal, pero uno lo interpreta cuando hay una animosidad y una situación premeditada de generar ese daño a través del monopolio de la fuerza pública”, comentó.

Para Berni este episodio no podría ser calificado de esa manera porque “los cuatro miembros que estaban en el patrullero relatan que ni bien el policía efectuó el disparo dijo que se le escapó”. “Le retiraron el arma, comunicaron directamente al fiscal y los propios compañeros lo detuvieron. No hubo ni siquiera la mínima intención de encubrir”, argumentó.