Un barrabrava del Club Atlético Atlanta que se encontraba prófugo hace más de dos años por el crimen del financista Carlos Walter Molina, asesinado de un tiro en el pecho en noviembre de 2021.

Se trata de Eduardo Miguel Ángel Ajalla Cabrera (38), alias “Calabaza”, señalado como el presunto autor material del asesinato de Molinaasesinado en el 2021 en un departamento del barrio porteño de Almagro, y por el cual dos mujeres fueron condenadas en septiembre pasado por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 12 porteño a penas de 14 y 5 años de prisión debido a sus respectivas participaciones en el homicidio.

Las fuentes señalaron que el Ministerio de Seguridad de la Nación ofrecía una recompensa de $ 1.500.000 para quienes aporten datos del paradero de “Calabaza”, quien era intensamente buscado hace más de dos años por aquel crimen.

Al respecto de su detención, los voceros indicaron que tuvo lugar el pasado viernes y fue efectuada por miembros de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad, quienes lograron dilucidar, a partir de escuchas telefónicas, que el hombre de 38 años emprendería un viaje hacia la Costa Atlántica y luego a Brasil junto a su pareja.

Por ello, los agentes detectaron que Ajalla Cabrera se movilizaba en una camioneta Dogde Ram por el barrio porteño de Palermo, por lo que procedieron a interceptar el vehículo y detener al prófugo.

Según detallaron los voceros, el vehículo era manejado por su pareja, mientras que había dos menores de edad que los acompañaban.

Finalmente, se incautaron los celulares hallados en el lugar de la detención y se determinó el secuestro de la camioneta en la que se movilizaba “Calabaza”.

El prófugo tenía una particular forma de desenvolverse, sin bienes a su nombre pero con un alto manejo de recursos, lo que dificultaba rastrearlo. Posiblemente por sus nexos con la hinchada de Atlanta“, señaló a esta agencia una fuente con acceso a la causa.

Luego de enterarse de la detención de Ajalla Cabrera, la novia de la víctima, María Belén Pérez, señaló a Télam que recibió la noticia como “un suspiro de paz al alma”.

“Siempre confié en la justicia. Es un alivio. Sobre todo en estas fechas que todo duele un poquito más”, afirmó emocionada María Belén.

Por el asesinato de Molina (43), fueron condenadas el pasado 11 de septiembre Julieta Lacivitta y Estefanía Vanesa Romer, quienes pertenecían a una banda criminal que se dedicaba a robarles dinero a “arbolitos” o financistas.