La joven de 22 años fue asesinada en 2017 y su cuerpo apareció gracias al aporte de los perros de los Bomberos Voluntarios. Hay ocho acusados que podrían ser condenados a perpetua. 

A partir de las 8.30 de mañana comenzará en los tribunales de San Martín los alegatos en el juicio a ocho hombres acusados de matar a Araceli Fulles, la joven de 22 años que en 2017 fue hallada asesinada en una casa de la localidad bonaerense de José León Suárez en el marco de un brutal femicidio, de acuerdo a lo informado hoy por voceros judiciales. 

La jornada se inaugurará con el alegato de la fiscal Mariana Piwarczuk ante el Tribunal Oral Criminal (TOC) 3 de San Martín, integrado por los jueces Martín Klobovs, Carolina Martínez y Aníbal Bellagio. Siempre en base a datos oficiales, se prevé que se extiendan hasta el jueves.

En el banquillo de los acusados por el crimen de Araceli se encuentran Carlos Casalz, Hugo Cabañas, Hernán Rodrigo Badaracco, Marcelo Escobedo, Carlos Antonio Ibarra, Daniel Alaniz y los hermanos Jonathan y Emanuel Ávalos, todos señalados por el delito de “homicidio agravado por femicidio y por la participación de dos o más personas”, que prevé la prisión perpetua.

Comienzan los alegatos por el femicidio de Araceli Fulles
Araceli Fulles

En la causa había un noveno sospechoso, identificado como Darío Badaracco y hermano del acusado Hernán Rodrigo. Fue de hecho el principal detenido que tenía la investigación pero murió el 13 de abril de 2019 luego de haber permanecido internado cinco días en un hospital de la ciudad de Olavarría, tras ser atacado a golpes y quemado con agua caliente por dos compañeros de celda en el penal de Sierra Chica.

En libertad

Todos los implicados llegaron en libertad al debate oral, pero a lo largo del proceso judicial se registraron una serie de amenazas por parte de dos de los imputados -Carlos Casalz y Hugo Cabañas- cuyas víctimas fueron familiares y testigos, por lo que fueron detenidos el 12 de septiembre y el 14 de septiembre, respectivamente.

Casalz fue arrestado cuando fue a votar, acusado de amedrentar a un testigo y a la madre de Araceli, Mónica Ferreyra, a quien le mandó un video de nueve segundos con una ametralladora diciendo “hay bala para toda la familia”, según detalló el abogado Szpigiel.

“Era sabido que iba a empezar a haber amenazas y muchas cosas porque van a querer impedir el juicio de mi hija”, declaró hace dos semanas Mónica, progenitora de la víctima fatal, al enterarse de la captura de Casalz.

En tanto, a Cabañas lo apresaron luego de que intentara ingresar a la segunda audiencia del juicio oral con un arma blanca y el juez Klobovs lo procesó bajo prisión preventiva hasta que se dé a conocer la sentencia, la cual todavía no tiene una fecha definida.

Por el debate oral pasaron casi 300 testigos, donde se intentó reconstruir minuciosamente el recorrido de Araceli y de los imputados durante la noche del hecho.

La escena

La joven, de 22 años, fue hallada sin vida el 27 de abril debajo de unos escombros en el patio de la casa de Darío Badaracco (31), ubicada en Alfonsina Storni 4477 de José León Suárez, partido de San Martín, en el noroeste del conurbano.

Había sido vista con vida por última vez la madrugada del 2 del citado mes de 2017 en una plaza cercana a su domicilio, y el último contacto con su familia fue a las 7 de la mañana de ese día, cuando le envió un mensaje a su madre diciéndole: “Vieja, prepará las cosas para el mate que estoy yendo para casa”.

Pero Araceli nunca llegó y su cuerpo apareció 25 días después, tras la intervención de perros pertenecientes a los Bomberos Voluntarios de Punta Alta.

Una vez realizados los correspondientes trabajos en la escena del hecho, el cadáver fue removido hacia la morgue, donde se llevó a cabo la correspondiente operación de autopsia. Allí, los médicos forenses determinaron que la joven murió por “asfixia mecánica