En su alegato, la fiscalía pidió además, expulsar del país a 10 ciudadanos venezolanos acusados de integrar una banda que cometió distintos hechos delictivos contra turistas. El acusado del crimen frente al Hotel Faena era parte de la organización.
La fiscal María Luz Castany pidió la pena de prisión perpetua para el acusado de integrar una asociación ilícita que cometió varios robos a turistas, entre ellos el que terminó con el homicidio del inglés Mathew Charles Gibbard y la tentativa de su hijastro Stephan Joshua Zone, ocurridos en diciembre de 2019 frente al Hotel Faena de Puerto Madero.
El pedido hecho ante el Tribunal Oral Criminal 17 fue el de prisión perpetua para el ciudadano venezolano Ángel Eduardo Lozano Azuaje; y de entre tres años y cuatro para Carlos José Manzo Tortolero -aunque en el debate refirió apellidarse López Sánchez-, Luis José Lozano León, Aly José Ramos Ladera, Miguel Ángel Aguirre Cancine, Rubén Dario Cañete Lobo, Elvis Javier Escalante Blanco, Christian Rafael Caicedo Lobo, Samuel Francisco Zerpa Menezes y Carlos Alberto Martínez Moreno.
Todos están acusados de integrar una asociación ilícita que funcionó entre el 12 de noviembre y el 14 de diciembre de 2019, y que se dedicaba a realizar robos montados en motocicletas a partir del seguimiento de turistas que ingresaban por el Aeropuerto Internacional de Ezeiza a nuestro país.
Sobre todos los ciudadanos venezolanos para los que pidió penas, también reclamó que se los expulse del país y en ese sentido reclamó la intervención de la Dirección Nacional de Migraciones.
Por último, le pidió a los jueces el decomiso de los distintos vehículos y motocicletas empleados por la organización en los robos bajo análisis.
Según la investigación, el modus operandi consistía en el seguimiento de los turistas una vez que ingresaban al Aeropuerto de Ezeiza, y una vez que llegaban a destino los sorprendían a bordo de motos y con violencia los despojaban de sus pertenencias.
El hecho que tuvo como víctima al turista inglés Matthew Gibbard ocurrió el 14 de diciembre de 2019 cuando llegaba al Hotel Faena.
En esa oportunidad, el acusado Lozano Azuaje se acercó con un arma y les exigió que le entregaran sus relojes y el equipaje a partir del cual hubo un forcejeo, y aquel le disparó.
Gibbard recibió dos tiros en su espalda que le ocasionaron la muerte, mientras que su hijastro padeció una fractura expuesta lateral del fémur izquierdo, producto de otro proyectil.