El traslado del jefe narco se realizó en helicóptero en medio de un total hermetismo ya que los investigadores determinaron que existía riesgo de intento de fuga o que sufriera un atentado en su contra.

El jefe narco Marco Antonio “Marcos” Estrada González, quien durante años lideró una organización dedicada a la venta de estupefacientes en el barrio porteño 1-11-14 del Bajo Flores, fue extraditado esta madrugada a Perú, en un operativo que incluyó el traslado en helicóptero desde el penal donde estaba alojado.

Según confirmaron fuentes policiales, Estada González fue trasladado en la madrugada en medio de un operativo especial que contó con la participación de efectivos de la División Asuntos Migratorios e integrantes del Grupo Especial de Operaciones Federales (GEOF) desde el Complejo Penitenciario Federal 2 de Marcos Paz hacia el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.

El traslado se realizó en un total hermetismo ya que los investigadores determinaron que existía riesgo de un intento de fuga o que sufriera un atentado en su contra.

“Marcos” estaba detenido cumpliendo una condena de 24 años de prisión los delitos de “narcotráfico y acopio de armas de guerra”.

Por tal motivo, el 20 de mayo pasado, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOF) 3 -el último que lo había condenado en un juicio en el que la acusación estuvo a cargo del fiscal Diego Velasco-, autorizó el extrañamiento (expulsión del país) a Perú de Estrada González, en un fallo en el que le solicitó a la Dirección Nacional de Migraciones que disponga los medios para que realice el traslado del condenado a Lima y que le prohiba de manera permanente el reingreso a Argentina.

Ya en 2014, Migraciones le había revocado su radicación permanente y había ordenado su expulsión del país por considerar “irregular su permanencia en el territorio nacional”.

Fuentes judiciales informaron a la agencia de noticias Télam que “Marcos” no puede volver a la argentina de por vida y que, si lo hace dentro de los proximos 12 años, deberá cumplir toda la condena que se le impuso en el juicio.

Si bien la expulsión del capo narco había sido dispuesta en mayo pasado, la fecha exacta fue mantenida en secreto ante los riesgos de su traslado,

De ese modo, en horas de la noche, ocho móviles con efectivos federales se hicieron presentes en el penal para llevarlo al aeropuerto.

Pero instantes antes de la partida, y con el objeto de evitar posibles filtraciones, los federales realizaron un cambio de último momento y aterrizaron un helicóptero en el penal, a bordo del cual subieron a Estrada González y lo llevaron rumbo al aeropuerto, donde -también bajo custodia federal- tomó un vuelo a Perú.