Así lo anunció el vocero presidencial Manuel Adorni. La decisión incluye “todo lo referido a la perspectiva de género”, puntualizó.

El presidente Javier Milei prohibió la utilización del lenguaje inclusivo en la administración pública. La decisión se comunicó hoy martes por el vocero Manuel Adorni en su habitual contacto con periodistas en Casa Rosada. “Se va a proceder a iniciar las actuaciones para prohibir el lenguaje inclusivo y todo lo referente a la perspectiva de género”, informó el funcionario.

Manuel Adorni anunció la prohibición del lenguaje inclusivo

“No se va a poder utilizar la letra “e”, el arroba, la “x””, puntualizó Adorni y agregó que se evitará en la redacción de documentos públicos “la innecesaria utilización” del género femenino. Una periodista insistió en el tema y Adorni aclaró que el Gobierno no está dispuesto a ingresar a un debate sobre el lenguaje y declaró que las perspectivas de género se han utilizado como “un negocio de la política”.

El Ministerio de Defensa a cargo de Luis Petri ya había comunicado una medida similar que obliga a cada área de su cartera a emplear el idioma castellano, “conforme a la normativa y reglamentación que rige cada área respectiva, bajo los términos y reglas fijados por la Real Academia Española (RAE)”. El incumplimiento de esta iniciativa provocará sanciones, advirtieron. El lenguaje inclusivo fue objeto de una polémica en 2022 luego de que el gobierno porteño prohibiera su utilización en las escuelas.

La medida, impulsada por la entonces ministra Soledad Acuña, fue rechazada por el gobernador de la provincia de Buenos Axel Kicillof, quien convocó a los alumnos a “rebelarse” y no seguir mandatos elaborados en España (en alusión a la RAE). En la misma rueda de prensa, Adorni explicó por qué el presidente decidió que este año la Asamblea Legislativa se realice a las 21 y no al mediodía, como se acostumbró históricamente.

El Gobierno anunció que va a prohibir el uso del lenguaje inclusivo:

Y su explicación resultó lógica ya que explicó que “se busca que la mayor cantidad de argentinos puedan escuchar al presidente después de sus horarios de trabajo, en un hecho sin precedente en la historia Argentina”. Y en ese horario generalmente la mayor parte de la población se encuentra en sus domicilios y es la hora de la cena.