Piñeiro estaba internado en estado crítico desde el domingo, luego de sufrir un ACV hemorrágico
Ricardo Piñeiro, el histórico representante de modelos, murió este miércoles despues del mediodía. Piñeiro habia sufrido un ACV hemorragico y fue derivado en primera instancia al Hospital Fernández y luego su familia lo trasladó horas despues al Sanatorio Otamendi. Su partida causó profunda consternación en el mundo del espectáculo. Según confirmó el director del SAME Alberto Crescenti, cuando lo encontraron luego de un llamado al 911, se ecnontrba con muy bajos signos vitales.
Se desconocía la cantidad de horas en las que Ricardo Piñeiro puede haber estado descompensado, motivo por el cual su estado era muy critico e irreversible. Ya en el Sanatorio Otamendi, se emitió un parte médico oficial del lugar: “El paciente se encontraba en estado reservado, con asistencia respiratoria mecánica, producto de un ACV hemorrágico”. Desde entonces, se vivieron horas críticas y muy tristes, y se armó una cadena de oración para pedir por su recuperación.
La cadena se inició en la comunidad del espectáculo, pero luego se sumaron miles de personas que le tenian estima a Piñeiro. Modelos, periodistas, famosos en general se volcaron a las redes para elevar una plegaria en favor de su pronta recuperación. Hasta que llegó la noticia de su muerte. Piñeiro nació en febrero de 1956 en Montevideo, Uruguay. En la década de los 90, se convirtió en uno de los mayores representantes de modelos de Argentina.
A partir de su agencia supo crear un imperio con las figuras femeninas más destacadas del país, copando casi todas las tapas de revistas y los programas de televisión. Durante esos años, tenia en su porfolio a las mejores modelos, las más destacadas como: Andrea Frigerio, Mariana Arias, Verónica Lozano y Paula Chaves, solo por mencionar algunas de diferentes generaciones, pero fueron miles las que salieron de su agencia.
En el año 2011 sufrió un duro revés económico que lo obligó a reinventarse, un episodio crucial que significó un punto de inflexión: por una estafa perdió “hasta el nombre”, el mismo en varias entrevistas reconoció, el hecho del que asegurara que también tenía una parte de responsabilidad. El solía explicar que nunca se le habian dado bien los negocios y que nunca fue un buen empresario, sino más un “idealista”, y ese tipo de experiencias son las que forjan el aprendizaje.
Esto motivó el alejamiento del universo fashion y reformuló su nueva vida que incluía el cuidado de sus perras, combinando su pasión por la fotografía, al que ingresó en una de las tantas vueltas de la vida. Lo que primero era un pasatiempo, se volvió una actividad que se tomó cada vez más en serio gracias al ojo de Gabriel Rocca. El célebre fotógrafo, quien había trabajado con él en su agencia, notó un talento que desarrolló con su habitual tenacidad.
Así Piñeiro llegó a exponer en diferentes salas del país y sus musas fueron algunas de sus pasiones: sus adorados perros y las edificaciones emblemáticas de la ciudad. Volvió a ser noticia cuando trascendió su ayuda como voluntario en la iglesia Hermanas Esclavas del Sagrado Corazón, donde colaboraba en la asistencia a personas en situación de calle. También la batalla que libró contra el alcoholismo y la sanación que encontró en el mismo espacio religioso.
Una vez que se conoció la noticia, una de las primeras en manifestarse fue Fernanda Villaverde: “Richard, no puedo más del dolor. Que descanses en paz. Te amo y amaré siempre”, escribió junto a una foto en la que se los ve lookeados en blanco y negro para algún evento de tantos.